Le fueron a arreglar un caño y terminaron rompiendo otro

Un joven compró un terreno y empezó a construir su casa en Altos de San Lorenzo. Está cumpliendo el sueño de muchas personas: edificar su futuro hogar en un barrio tranquilo del Sur de La Plata. En la obra, entre las tareas que se realizaron en el suelo, por un descuido se terminó rompiendo un caño subterráneo que terminó provocando un verdadero caos para los vecinos de 28 entre 76 y 77.

Mónica Fernández, una vecina de la zona, le contó a diario Hoy que en seguida el muchacho llamó a Obras Sanitarias y luego ABSA para solucionar el problema, pero fue peor el remedio que la enfermedad.
“Vinieron a arreglarle un caño y le terminaron rompiendo otro”, ex­plicó indignada esta frentista.

En la esquina de calle 77, por este motivo, el agua circula en el pavimento con la misma fuerza de un arroyo. Y como si fuera poco el problema del caño roto a mitad de cuadra, también hay desbordes cloacales, como también se puede ver en gran parte de la ciudad.

Los vecinos no saben qué hacer. Varios frentistas de Altos de San Lorenzo han optado por poner escombros en los ingresos a las cocheras de las casas. Con esto intentan tapar con piedras el agua infectada con de­sechos y materia fecal que sale a la superficie de las desbordadas cloacas, en un momento en que la limpieza y la sanidad son principios esenciales de vida.

“Lo que pasa es que cuando entramos los autos, los desechos se arrastran hacia adentro de las casas con las ruedas. Muchos autos son guardados adentro de las casas y hasta que no se solucione el problema de las cloacas y el caño roto estamos conviviendo y respirando permanentemente desechos”, comentó Mónica.