Preocupa la situación en la Ruta 7

En medio de la preocupante situación que atraviesan los campos en la zona de la laguna La Picasa, entre Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, un intendente de la zona advirtió que, si se derrumba el terraplén ubicado a la vera de la Ruta 7 ante el avance de las aguas, “ya no habrá nada que hacer” porque “a esa masa de agua no la para nadie, salvo con otro terraplén”. Así alertó el intendente de la localidad bonaerense de General Pinto, Alexis Guerrera.

Tanto el municipio de General Pinto como el de General Villegas realizan tareas de prevención en los pueblos cercanos a la laguna ante la eventualidad de que el agua sobrepase esa ruta nacional, pero sus autoridades aseguran que no hay obras sustentables que se puedan realizar frente a las lluvias que sufrió la región. El Comité de la Cuenca Hídrica de La Picasa tiene previsto reunirse el lunes debido a la gravedad de la situación, que obligó a cerrar la Ruta 7 -que une Buenos Aires con Mendoza y llega a Chile- entre los kilómetros 385 y 392. 

Frente al corte, las alternativas se reducen y continuar viaje se dificulta: los caminos de tierra están anegados, lo que vuelve imposible transitarlos.

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