Renunció Aníbal Torres jefe de Gabinete de Perú

En una carta dirigida a Castillo a través de su cuenta de Twitter, Aníbal Torres expuso su renuncia como jefe de Gabinete de Ministros: “Por razones personales pongo a su disposición el cargo de presidente del Consejo de Ministros. Aprovecho esta oportunidad para agradecerle por la confianza depositada en mi persona, primero como ministro de Justicia y luego como premier”, indicó Torres hacia el presidente.

Aníbal Torres, de 79 años, es un hombre cercano al mandatario y lo acompañó desde su época de candidato a la presidencia, siendo luego designado ministro de Justicia en el primer gabinete ministerial del gobierno, cargo que desempeñó hasta febrero de este año. Esta situación de renuncia se da en medio de la crisis política que rodea al gobierno de Pedro Castillo, que comenzó su segundo año ceñido por intentos de destitución que promueve la oposición en el Congreso, sumado a investigaciones de hechos de corrupción de la fiscalía.

El exjefe de ministros expresó que se retira del cargo después de haber servido a su patria, “especialmente al pueblo más postergado y olvidado”. A pesar del escenario, el político se mostró feliz de poder seguir ejerciendo su rol do­cente, y de regresar a las aulas junto a sus alumnos y alumnas, además de volver a realizar “lo que más extrañaba: la investigación jurídica”.

Cambios de ministros

La renuncia de un presidente del Consejo (quien es el encargado de la coordinación entre los miembros del gabinete y de llevar las relaciones del Ejecutivo con los otros poderes del Estado) implica que todos los funcionarios de igual cargo del gabinete tengan la obligación de presentar su renuncia para que el nuevo primer ministro rectifique o cambie la decisión. Torres, quien había asumido en febrero de 2022, es el cuarto jefe de Gabinete en dejar el cargo en medio de las polémicas que envuelven al presidente del país andino.

En este sentido, la fiscalía lleva adelante cinco investigaciones abiertas sobre Pedro Castillo, entre ellas por complicidad agravada en un proyecto de obra pública y por supuesta corrupción. También se menciona plagio en su tesis universitaria, y por tráfico de influencias en un contrato estatal de adquisición de combustibles.

El mandatario cumplió el 28 de julio pasado un año en el poder, durante el cual enfrentó dos intentos de destitución del Congreso, y acumula según encuestas una imagen negativa del 74% en la opinión pública.