La AFA quitó la ilusión y así volvieron a ganar los violentos

Las autoridades afistas, con el aval del gobierno nacional, decidieron suspender el festejo en el Obelisco que estaba pautado. Hubo mensajes contradictorios desde el polémico organismo del fútbol

Luis Segura, vicepresidente primero de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), dijo que la decisión de que los jugadores del seleccionado argentino de fútbol no se desplazarán hasta el Obelisco para saludar a los hinchas fue “una decisión acertada que tomó la AFA”. 

El dirigente, también presidente de Argentinos Juniors, descartó así que la decisión estuviera relacionada con “cuestiones de seguridad”. 

Segura además expresó que “la decisión fue exclusivamente de la AFA, y fue una medida acertada, ya que los jugadores estaban muy cansados en todo sentido, y también para respetar su estado de ánimo”.

Sin embargo, pasado el mediodía, la AFA había señalado mediante un comunicado que las autoridades habían recomendado que la Selección nacional se abstuviera de ir al Obelisco. 

Durante la tarde, los jugadores se retiraron del predio de la AFA en Ezeiza en sus propios automóviles con la intención de pasar unos días con la familia y dentro de unas semanas ponerse a tono con sus respectivos clubes.

De este modo, por la incapacidad del gobierno nacional para evitar hechos de violencia y el aval cómplice de la AFA, los hinchas albicelestes perdieron la posibilidad de vivir una jornada de fiesta en el Obelisco. De esta manera, otra vez volvieron a ganar los violentos y los simpatizantes genuinos de un deporte hermoso como el fútbol y de un seleccionado que representó muy bien a la Patria.

El fenómeno Mundial se sigue viviendo en las calles

En las calles de la república Argentina, en las plazas, oficinas y cualquier rincón del país, se sigue hablando de fútbol. Ya falta poco para la competencia local, pero la Copa del Mundo sigue dejando huellas.

Esta participación del seleccionado sorprendió a varios, por eso luego de la derrota del domingo se siguen viendo las camisetas celestes y blancas por las calles con orgullo.

El golpe deportivo no opacó en ningún momento lo conseguido por el conjunto de Sabella. La gente salió a las calles a manifestar su apoyo, hacia 24 años que no llegaba a una instancia final, por eso la alegría no se opaco con la derrota. Con el correr de los partidos en la fase de grupos, la gente empezó a tener confianza en los jugadores y el proyecto. En el último encuentro la ilusión se mantuvo hasta último momento y por eso el pueblo salió a agradecer a los 23 jugadores y al cuerpo técnico por devolverle la confianza al pueblo.

Mucho tiempo tuvo que pasar para que la gente se ilusione, que crea en un grupo y que la bandera nacional vuelva a a estar en lo alto.