Baleó a su exmujer, mató a la pareja de ella y luego se suicidó

El hombre se atrincheró siete horas en una casa. Le mandaba mensajes a una vecina mientras negociaba con la Policía, hasta que decidió quitarse la vida de un disparo 

Un hombre asesinó a la nueva pareja de su exmujer e hirió de dos balazos a ella delante de sus hijos de 10 y 11 años. Sin embargo, el fatídico episodio no terminó allí. El agresor luego se atrincheró en su vivienda durante siete horas, hasta que esta madrugada se suicidó de un balazo en la cabeza, informaron fuentes policiales. 

El hecho, que causó conmoción por el amplio despliegue de efectivos del Grupo Halcón y el corte de calles, comenzó cerca de las 22.30 del miércoles en el partido de Morón, y se extendió hasta las 5.30 de la madrugada de ayer.

Según los investigadores, todo comenzó cuando Raúl López (61) llegó a la casa de su exmujer Eliana Naugez (36), porque quería conversar ya que no aceptaba que ella tuviera una nueva relación.

“Ambos vivían en casas linderas y se conocían desde hacía muchos años. A pesar de la edad, mantenían una larga relación, pero con muchas idas y vueltas”, dijo un investigador.

Sin embargo, al llegar, López encontró a su exmujer con su nueva pareja y, en un ataque de furia, se dirigió a su casa, agarró un revólver calibre .32 y regresó a lo de Naugez. En ese momento, López apuntó desde una ventana y asesinó al hombre de un balazo en el pecho, tras lo cual hirió a la mujer de dos tiros, uno en un abdomen y otro en la pierna izquierda.

López escapó del lugar y se dirigió a su casa, y los vecinos que escucharon los disparos salieron a auxiliar a las víctimas.  “Sé la cag... que me mandé, pero no me voy a entregar. Yo sé por qué lo hice”, le dijo en varias oportunidades al fiscal Sergio di Leo, quien llegó al lugar y comandó el operativo. Mientras tanto, el hombre les escribía a sus amigos por WhatsApp, contando detalles del hecho. 

“Se montó un operativo típico de toma de rehenes”, explicó un investigador. Durante varias horas, el fiscal mantuvo conversaciones con el hombre, intentando convencerlo de que se entregara.

Finalmente, el Grupo Halcón irrumpió en la vivienda y encontró a López sentado en una silla, con un balazo en la cabeza y el arma utilizada durante el episodio a su lado.