No existe la distancia para el amor a los colores

Miguel Martínez y sus hijos, Franco y Federico, empezaron a vivir la previa del duelo entre Pinchas y Leprosos. Oriundos de Rosario, pero con el corazón en La Plata, los fanáticos de Estudiantes pudieron sacarse fotos con sus ídolos y, en contacto con este medio, expresaron sus sensaciones a horas del “partido de la fecha” del fútbol argentino.

En declaraciones a El Clásico Radio, por Radio Gol, el mayor de ellos confesó: “El partido contra Newell’s es una final. El equipo de Diego Osella es muy duro y nosotros llegamos cansados después de jugar la Libertadores”.

En tanto, a pesar del resultado del martes por la Copa, los Martínez se ilusionan con seguir luchando en el campeonato local. Al respecto, sostuvieron: “Confiamos a muerte en el equipo, que ya demostró que le puede ganar a los mejores, como el año pasado ante San Lorenzo. De todas formas, un empate no estaría mal”. 

Por otra parte, la familia Martínez marcó presencia en el Hotel Ros Tower de Rosario y le brindó su cariño a los más experimentados del plantel. Allí, en la puerta del edificio, se tomaron fotografías con Leandro Desábato, Rodrigo Braña, Facundo Sánchez, Santiago Ascacíbar y Mariano Andújar, quienes muy amablemente posaron para la foto y también autografiaron camisetas viejas del Pincha. Asimismo, les desearon suerte a todos los futbolistas.