Descontrol general: el Vasco increpó a un compañero

El defensor cerró una semana para el olvido: el martes había estado en la práctica de Peñarol y ayer se fue expulsado en la Bombonera. “¡Qué te pasa... la p (sic)!”, le dijo a Schunke

La derrota ante Boca desnudó un costado desconocido del Pincha: la intolerencia. 

Ayer, luego de iniciar el segundo tiempo sin el entrenador Pellegrino, algunos jugadores no pudieron mantener el equilibrio y sumergieron al equipo en un verdadero caos. Tal es el caso del Vasco Matías Aguirregaray, quien cerró una semana muy particular: el martes se mostró tomando mates en la práctica de Peñarol a menos de 48 horas de que Estudiantes había perdido sobre la hora ante Banfield con una gran cuota de su responsabilidad. El miércoles inició una caza de brujas para descargarse con algunos periodistas, y ayer se terminó peleando con un compañero. Lo paradójico del caso es que el incidente protagonizado por Aguirregaray a los 18 minutos del segundo tiempo, tuvo como actor secundario a Jonathan Schunke, uno de los jugadores más cultos e intelectuales del plantel albirrojo, quien además se caracteriza por tener un carácter amable y solidario afuera de la cancha. 

El papelón que observó todo el país (el partido de Boca fue lo más visto en la jornada del domingo) se inició cuando Aguirregaray no pudo esconder su impotencia y golpeó desde atrás a un rival en un ataque de Boca, a pesar de que ya estaba amonestado. El jugador, quien no aceptó la segunda amarilla de Abal, se descargó con el propio Schunke, quien a la pasada le reclamó con criterio por su actitud de dejar al equipo con diez jugadores. Aguirregaray se acordó de la hermanda y la madre de Schunke y amagó con ir a golpear a su compañero que mide 1.94mts. y no se quedó atrás. 

A los 22 minutos, en tanto, el que  vio la roja de forma directa fue Carlos Auzqui por una dura entrada a Federico Carrizo. 

Fue la primera expulsión en el Pincha del uruguayo, que no se retiraba de un cotejo de forma anticipada por ese motivo desde febrero de 2013, en la igualdad 1-1 entre Peñarol y Fénix. Auzqui, en tanto, registró su segunda roja en el club.