Descubrimiento en el planeta rojo
Histórico anuncio de la NASA: Confirman existencia de agua en Marte
Tras analizar imágenes recientes de la superficie del planeta rojo, la agencia espacial convalidó sus sospechas: la presencia de agua salada y en estado sólido. Con el descubrimiento se da un gran paso en la búsqueda de vida
La ciencia parece tener buena prensa por estos días. Mientras la fascinación por la luna roja encantaba a una gran audiencia, la Agencia Espacial de Estados Unidos (NASA) anunciaba desde hace algunas horas que se daría a conocer un descubrimiento sobre Marte. Así fue que ayer finalmente se anunció, lo que algunos especialistas ya vaticinaban: se dieron a conocer las "pruebas más solidas hasta la fecha” de la existencia de agua líquida sobre la superficie de Marte.
Se informó que la evidencia para semejante confirmación son líneas sobre piedras fotografiadas en cuatro lugares diferentes de la superficie del planeta, que confirman la hipótesis de que se deben a la actividad actual de agua salobre, informaron los investigadores de un estudio que será presentado esta semana en el Congreso de Ciencia Planetaria Europeo, que se celebra en Nantes, Francia.
Se cree que Marte no sólo parece tener agua congelada, sino también corrientes de agua salada, por lo menos durante el verano. Las observaciones más recientes apoyan fuertemente la vieja teoría de que hay actividad actual de agua salobre por ciertas laderas marcianas.
"Hay corrientes oscuras y estrechas que tienden a aparecer y crecer durante los meses más cálidos de Marte y se desvanecen durante el resto del año. La sal reduce el punto de congelación del agua, lo que explicaría estos flujos salobres estacionales", explicaron desde la agencia espacial.
La NASA ya había determinado que Marte tuvo un océano hace unos 4.500 millones de años que ocupó el 19 por ciento de ese planeta, y que podría esconder bajo su superficie un depósito de agua o hielo, pero la nueva investigación agrega nuevos datos en este sentido.
En diálogo con diario Hoy, el especialista Esteban Tablón, ex director del Planetario de Buenos Aires, dijo que “la NASA ya había encontrado hielo y casquetes polares. Esta vez encontró agua fluida y es de verdad fundamental”. Tablón aseguró que “esto cambio el paradigma en la búsqueda de vida dentro del sistema solar”.
El especialista, explicó en este medio que más allá de la importancia hay algunas salvedades: “al ser agua salada, con la presión atmosférica baja de Marte se evapora a 10 o 12 grados. Esa agua líquida muy salina, por lo general en la Tierra no hay vida. Sin embargo, la posibilidad de encontrar fósiles, aunque sea de una bacteria, nos daría un cambio fundamental en todo este tipo de investigaciones”. Además, Tablón agregó que habiendo agua y carbono, “el ciclo de las plantas también sería posible en Marte, y este es otro factor de descubrimiento muy importante”.
Ahora, a buscar vida
Dado que el agua es un factor esencial para la vida, los resultados difundidos por la NASA podrían tener implicaciones muy importantes. Los investigadores dijeron que se justificaría hacer una exploración adicional para determinar si podría existir actualmente alguna vida microscópica en Marte. Es más, la agencia espacial ya tendría decidido afinar los números y acelerar la misión que todos sueñan.
Alfred McEwen, investigador principal del experimento encargado de capturar las imágenes en alta resolución que han llevado al hallazgo de indicios directos de agua líquida en Marte, consideró que: “La probabilidad de que haya vida (en forma de microbios) en Marte es muy alta”.
Lo afirman los científicos
La científica Lujendra Ojha, parte del equipo que anunció el descubrimiento, explicó que aún es pronto para saber qué implicaciones tendrá este hallazgo para buscar vida en Marte, pero “sería importante extraer muestras y analizarlas detalladamente en la Tierra”. Además, explicó que “el agua líquida corre por los cañones y las paredes de Marte durante los meses de verano. Se trata de un descubrimiento previo que podría ser un espaldarazo para las hipótesis de que hay vida en Marte. Si se confirmase la presencia de agua líquida sobre la superficie del planeta, el siguiente paso sería buscar vida activamente” se explicó.
Diego Bagú: “esta confirmación va camino a algo más importante”
El astrónomo y director de Gestión del Planetario Ciudad de La Plata, Diego Bagú, expresó que “el hecho de que haya agua líquida en Marte abre un montón de expectativas en cuanto a la posibilidad de existencia de vida, al menos de forma microorgánica” y consideró que es probable que la NASA acelere su programa espacial tripulado hacia ese planeta.
“Este anuncio de la NASA es la confirmación de algo que se pensaba desde hace años. Pero, en la ciencia, hasta que no hay una evidencia concreta, nada se puede afirmar”, explicó el científico de nuestra ciudad.
“La mayoría de las naves que hoy están trabajando en la superficie en Marte intentan hallar rastros de ese tipo de vida”, destacó Bagú, y consideró que “esto acelera y fortalece todo lo que es el programa tripulado que tiene en mente la NASA; el gran próximo paso en la exploración espacial tripulada es el viaje a Marte”.
Un avance extraordinario
“La confirmación de la NASA de hoy (por ayer) es algo muy importante. Es un avance extraordinario. En 2011, un estudiante del doctorado inició este trabajo cuando encontró una serie de líneas que se ven en las fotos como estrías oscuras y detectó que no estaban siempre”, afirmó en relación al científico que descubrió la intermitencia de los flujos de agua.
Por otro lado, el especialista detalló que mientras China tiene como objetivo descender en la Luna con astronautas, Estados Unidos “acelera su programa espacial hacia Marte”, y añadió que “no obstante, es tanto el dinero que se necesita para llevar al hombre hasta ese planeta, que no solamente será una misión de un solo país, sino que será de carácter internacional: USA, Europa, Japón”.
Bagú estimó que ese viaje podría llegar a realizarse alrededor de 2030, y opinó que “en 15 o 20 años podremos ver el descenso del hombre en Marte”. La duración de esa misión dependerá de qué tipo de cohete y qué tipo de motores se utilicen: hoy en día con la tecnología que tenemos llevaría entre 8 y 9 meses”, afirmó.