Un cohete de fabricación nacional estalló a dos metros del suelo en un lanzamiento de prueba

Fue durante un ensayo de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales, que proyectó un prototipo de lo que será la nave que lleve satélites al espacio. Ocurrió en Punta Piedras, a metros del Río de la Plata

El pasado 26 de febrero la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) realizó una fallida prueba para el proyecto Tronador, que prevé el lanzamiento de cohetes al espacio con el fin de poner satélites argentinos en órbita.  

El prototipo vector Vex 1A, de casi 15 metros de largo, logró despegar y se elevó unos dos metros, pero su vuelo torció el rumbo y se estrelló en el piso envuelto en llamas.

La prueba se realizó en una plataforma de lanzamiento ubicada en Punta Piedras, frente al Río de la Plata, a pocos kilómetros del faro de la Bahía de Samborombón. Y, si bien hubo un efectivo silencio alrededor -no hubo prensa-, contó con la presencia del ministro de Planificación, Julio de Vido, el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, y el titular de la SIGEN, Daniel Reposo.

Los pobladores de la zona fueron alertados sobre el lanzamiento debido a que, por protocolo, la policía local debió evacuar 8 kilómetros a la redonda, según el testimonio de Gerardo Landa, que es presidente de la Sociedad Rural de Punta Indio y cuyo campo está en la zona "de protección".

Eran las 15 y allí esperaban el intendente de Punta Indio, Hernán Yzurieta, científicos y técnicos de la CONAE, de la fabricante Veng y de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata.

Para presenciar el despegue, De Vido y otros funcionarios llegaron al lugar a bordo de un helicóptero, sobrevolaron la zona y bajaron en la cancha del Complejo Municipal de Pipinas, donde está el centro de control y monitoreo, y donde se aprieta "el botón" para lanzar el cohete, señala el diario.

Pero a pesar de la  gran expectativa generada, el cohete apenas se elevó y cayó partiéndose al medio, al parecer por problemas con tensores neumáticos que enganchan el motor. La intención era que volara unos 300 metros y luego cayera al río, donde se recuperarían parte de sus materiales.

A pesar de ello, especialistas ligados al proyecto explicaron que se trató de la primera prueba, y que restan lanzarse de tres a seis cohetes experimentales más. "Fue un éxito" porque "el cohete se elevó", dijo Marcos Actis, decano de Ingeniería de La Plata, al periódico local El Colono.