ENTREVISTA EXCLUSIVA
Laura Azcurra: “Forjé mi camino al andar”
Es actriz, bailarina e investigadora de flamenco. Actualmente estudia una obra performática y debutará con un programa social y político transmitido en internet.
Con una intensa trayectoria a cuestas, Laura Azcurra construyó su carrera en cine, teatro y televisión. Curiosa e inquieta, divide sus días entre sus labores como intérprete y la pasión por el flamenco. En una entrevista exclusiva con diario Hoy, la intérprete reflexionó sobre su carrera y su gran compromiso con las luchas de género.
―¿De qué manera pensás tu trayectoria?
―Como una conjunción de propuestas, deseos, proyectos. Pienso que la vida es un fluir y que cada cosa aparece en el momento justo y preciso. En relación a los personajes, creo que llegan a la vida del actor para una enseñanza mutua; nos transforman y tienen un misticismo que no es casual. Forjé mi camino al andar, mientras la intuición me hablaba e invitaba a ser parte de cada proyecto. Siempre hay una cuota de corazón e interés en ello. Más allá que hay un trabajo y un salario. También fui parte de proyectos que quizá no estaban bien remunerados pero artísticamente me dieron más que cualquier otro rédito económico. Pude hacer lo que me gustaba y siempre con una cuota de riesgo. Nunca quise estancarme, siempre estuve tratando de sacarme las etiquetas que intentaban ponerme desde afuera. Un obrero del arte debe estar dispuesto a poder contar una historia e interpretar personajes en cada uno de esos espacios. Estoy muy contenta con el tránsito desde que comenzó mi profesión. Aprendí mucho. Soy muy agradecida.
―¿En qué proyectos estás inmersa?
―A principios de enero estaba trabajando en una comedia musical y tenía un papel pequeño en Separadas, la única ficción que se estaba haciendo en Argentina. Después iba comenzar los rodajes de una serie producida por Netflix, que finalmente no se va a hacer. Además continuaban las funciones de Salir al ruedo junto a Mariana Astutti, una obra de teatro físico con temática flamenca hereje, que es una creación nuestra. Todo esto se desvaneció. Ahora en la nueva composición del mundo, tal y como se plantea, me dejo llevar por la marea y sigo adelante con dos propuestas. Después de llorar el mundo viejo que no volverá, voy adelante con un emprendimiento vinculado a la salud y la tradición, que saldrá a la luz en los próximos meses. Se trata de saltar al vacío con un espacio que no conozco mucho pero ahí voy muy bien acompañada. También estoy estudiando un formato que no tenga exclusivamente pantalla, que me fue acercado por dos creativos publicitarios que plantean una obra performática que sea un espacio teatral pero que pueda compartirse a través de las redes sociales. Hoy todos estamos buscando esta posibilidad, en especial los que somos teatreros. Desde Única Contenidos, junto a Caro Fernández y Thelma Fardín, vamos a estar haciendo un programa semanal llamado Nosotras que nos queremos tanto en streaming. Tendrá un perfil político y social, para debatir esta sociedad construyendo, conocer a otros actores y los espacios de acción, realizar una apertura para todos los interesados, crear un espacio donde contar y abrir corazones, o mentes, en un momento tan importante y transformador como este.
La ficción nacional, un “espacio vacío”
―¿Cuál es tu mirada sobre la producción de ficción en el país?
―En crisis, desde antes de la pandemia, que llegó a ser una hermosa excusa para no tomar las riendas ni responsabilizarse de las falencias y espacios que ya venían vacíos desde antes. Me refiero al vacío cultural, desde nuestra identidad, a la hora de poder contar historias desde la ficción, cine o teatro regional o estatal.
En este frente cultural estamos juntándonos para repensar y rever de qué manera nuestra actividad puede salir adelante, siendo que fuimos los primeros en empezar la cuarentena y seremos los últimos en volver al ruedo. Para nosotros, ¿el Estado dónde está? Porque se reúne con los empresarios, salvando las empresas multimillonarias, pagando deudas que adquirieron otros. Muchos trabajadores, no solo de la cultura, sino en general, no están percibiendo sus sueldos; existen pagos atrasados que no ponen al día. Tengo la empatía para poder entender esta realidad que es absolutamente inédita de manera global pero también desde nuestra realidad, en este rincón del mundo vemos que todo se exacerba. El arte y las ficciones abrazan el corazón de la gente, acompañan y sanan en muchos momentos del día que son muy difíciles.
El final del camino
―Tras este presente tan inusual para el mundo entero, ¿cómo creés que se sale adelante?
―Creo que apagando la televisión. En este sentido también estaría bueno no consumir porcentajes ni escuchar especulaciones porque causan ansiedad y potencian el miedo. Quiero decir, es mejor no echar leña al fuego a este momento inédito porque genera ansiedad a los que somos controladores y programamos. Ahora hay que abrazar, con mucha lucidez, el momento presente.