Entrevista exclusiva
Marcela Baños: “Pasión transmite alegría y me encanta ser la portavoz”
Es locutora y se ha desempeñado exitosamente en distintos programas y proyectos. Sin embargo, para muchos es el rostro y el alma de la fiesta de la movida tropical de cada sábado.
Tras estudiar locución, fue a un casting para conducir un programa de música tropical en la televisión argentina. Desde entonces, hace 20 años que Marcela Baños es el rostro de Pasión de Sábado, un ciclo que entretiene y transmite alegría más allá del contexto.
Hoy pone lo mejor de sí para alivianar la cuarentena y nos cuenta cómo se siente con eso.
—¿Cómo estás pasando la cuarentena?
—Bastante bien porque soy muy casera, estar en casa no me afecta, al contrario, me gusta. Y tengo la suerte de tener la posibilidad de seguir trabajando, entonces siempre tengo ese escape semanal donde estoy en contacto con mis compañeros y amigos. Ir a grabar ha sido una fiesta y lo seguimos disfrutando un montón.
—¿Cómo es hacer Pasión de sábado en tiempos de cuarentena?
—Una tristeza. Nada que ver porque para grabar somos entre diez y quince personas, pero no hay tribuna ni grupos en vivo. Es otro programa, le ponemos onda para divertirnos y que la gente que lo esté mirando se divierta con nosotros, pero no es lo mismo. Ahora estamos más divertidos porque sabemos que hay que ponerle un poquito más de onda porque esto se hizo largo, pero la realidad es que Pasión se nutre mucho del vivo.
—Pasaste por muchos ciclos, pero sos la cara indiscutida de Pasión de sábado, ¿qué es lo que más te gustó de todo lo que hiciste? ¿Cambiarías algo?
—No, por algo hace tantos años que estoy en el programa, me tocaba estar ahí. Yo soy muy creyente de que cuando uno llega a un lugar es por algo y de todas las cosas saco lo mejor. Y también pienso que cuando se tienen que ir es por algo, porque ya no tiene nada que ver con vos porque aprendiste la lección, así que lo vivo de esa manera. No me apego a las cosas, al contrario, creo que me vienen a dar una gran enseñanza y en el caso de Pasión es un programa que tiene mucho que ver conmigo porque le da alegría a la gente y a mí me encanta dar ese mensaje en televisión.
—Pese a que la música tropical se escucha en todos los estratos sociales y lo baila todo el mundo, suele estar estigmatizada, ¿cómo lo vivís?
—Nos ha jugado en contra a varios de los que hacemos la movida, pero el punto es que ha evolucionado y que siga evolucionando. La música es música y te genera sensaciones hermosas, me parece que hay que entregarse, dejarse llevar y no juzgar. Después el género es un gusto personal. Pero discriminar por la música me parece patético y creo que habla más del otro que de uno, porque el que prejuzga es el otro y el que no sabe divertirse es el otro. Pero no lo quiero juzgar porque muchas veces se habla desde el desconocimiento, por no permitirse.
Su lucha proteccionista por los “sin voz”
Amante de los animales, hace muchos años, tras el fallecimiento de su perro decidió adoptar. Con Yago, que ya no está entre nosotros, se metió en ese mundo y al respecto explica: “Hay que concientizar y educar para que la gente entienda que son seres sintientes a los que hay que respetar, amar y cuidar. Hay que aprender mucho de los animales porque ellos tienen códigos que nosotros hemos perdido”.
Marcel es madrina de El Campito Refugio. Sobre eso, dice: “Es algo de mucha responsabilidad y me hace sentir plena porque ayudo a un otro sabiendo que no puede defenderse. Eso es hermoso”. “Se los llama los sin voz o los cuatro patas... A mí me gusta los sin voz porque eso habla de que dependen de nosotros y ese es el lugar que ocupamos”, concluye.
“Hay gente que necesita salir a laburar”
Consultada acerca de su visión de la cuarentena, Marcela opina “Creo que el Gobierno está tratando de hacer lo mejor. A mí me preocupa la gente que necesita pagar el alquiler y las cuentas.
Yo tengo la suerte de poder quedarme en mi casa, entonces es muy difícil, no puedo juzgar una situación si no la estoy viviendo. Pero me pongo en el lugar del otro y creo que hay gente que realmente necesita salir a laburar, entonces entiendo que deberían abrir de a poco y con ciertos protocolos para que todos puedan tener tranquilidad a la hora de trabajar”.