ENTREVISTA EXCLUSIVA
Luly Drozdek: “Formé una familia divina y estoy feliz por eso”
En diálogo con diario Hoy, la actriz confesó sus alegrías íntimas y precisó los detalles de su intenso presente artístico, tras un protagónico teatral que, pandemia mediante, se vio postergado indefinidamente.
Dueña de una sonrisa que todo lo puede y un gran talento en la profesión que más ama, Luisa “Luly” Drozdek divide sus días entre la actuación en obras comerciales e independientes, participaciones en la pantalla chica y otras en el cine. Además, la también comunicadora social está casada con el relacionista público Hernán Nisenbaum y ambos son padres de la pequeña Delfina. En diálogo con diario Hoy , detalló cómo incursionó en el arte y las experiencias en el desempeño actoral. Además reveló sus proyectos y las vivencias que le deja la maternidad.
—Siempre expresás cuánto amor tenés por la profesión. ¿De qué manera incursionaste en la actuación?
—Desde chica quería ser actriz. Es por eso que a los 10 años empecé a estudiar teatro y comedia musical; lo hacía como hobby y veía muy lejano el hecho de trabajar como intérprete. Al finalizar la secundaria , concurrí a la universidad y me recibí en la carrera de Relaciones Públicas. Y mientras estaba dando mi último final me llega la información de una propuesta para una obra de teatro donde precisaban una cara nueva. De esta manera me presenté y recuerdo que estaba lleno de chicas. Yo tenía cero expectativas. Al otro día sonó el teléfono, era el director de la obra, Roberto Antier, quien me informó que resulté electa. Una semana después, estaba mi cara en una marquesina gigante en la calle Corrientes y compartí cartel con grandes estrellas de inmensa trayectoria. Desde ese momento nunca dejé de trabajar. Así empecé con pequeños roles y de a poco fui ganándome un lugar en la escena artística. Voy paso a paso, aprendiendo cómo manejarme y ser súper profesional. Aprendí de los grandes actores con los que trabajé y siento que hoy en día estoy bien preparada para afrontar lo que venga.
—A pesar de la pandemia imperante, ¿en qué proyectos
laborales estás inmersa?
—En febrero de 2020 estrenamos la obra Si la cosa funciona, cuya autoría es de Woody Allen, en el Teatro Astros. Este proyecto fue mi primer protagónico teatral junto a un elenco repleto de talentos, constituido por Luis Luque, Roly Serrano, Carolina Papaleo y Laura Novoa, con la dirección de Manuel González Gil y la producción de Daniel Comba. Solamente estuvimos en cartel por un mes y medio porque el 14 de marzo suspendieron la obra debido al Covid-19. La idea era regresar a los 15 días pero no pudo ser. Imagínate que mis fotos quedaron pegadas en el camarín. Mientras se extendía la pandemia, menos idea teníamos cuando sería el regreso. Para 2020 tenía proyectos como dos películas, el teatro y la serie Millennials para Netflix, donde habíamos grabado las primeras dos temporadas y luego vendría la tercera. Esta última la hicimos hace unas semanas con todos los protocolos posibles, terminamos 15 capítulos. Estoy feliz por trabajar en un año complicado para todos, me siento privilegiada. También realizo la conducción de Mundo.
—Con tu recorrido por la escena, ¿qué visión tenés sobre las producciones en Argentina?
—Desde hace unos años estudio Historia del Arte porque me interesa mucho. En Argentina hay artistas por donde mires, sin embargo siento que a veces no les dan la posibilidad de explotar y es por ello que muchos terminan trabajando en el exterior.
—¿Qué vivencias tuviste en este momento tan inusual de la
humanidad? ¿Cómo congeniás la profesión con la maternidad?
—Trato de ver el lado positivo. Al tener una bebé, aproveché el tiempo para jugar con ella y no perderme de nada. Tengo amigas con hijos en plena edad escolar y no la pasaron muy bien. Respecto a la maternidad, se trata de saber organizarse y tener ayuda. Esto es básicamente así, sino es muy difícil. Por ejemplo mi mamá enviudó, tiene tiempo libre y es una gran ayuda, pero también tengo una niñera que me ayuda con Delfina cuando estoy grabando. De igual forma, soy una mamá muy fanática y, si estoy, quiero hacerlo todo.
—Tenés una figura privilegiada. ¿Cuáles son los secretos para estar tan linda?
—Trato de no hacerme problemas o mala sangre si tengo un kilo de más o de menos. Soy devota de los dulces, es por ello que trato de comer lo más sano posible. Igual debo confesar que esta pandemia me mató porque me la pasé comiendo de todo. También hago ejercicio en un gimnasio que armé en mi casa, mientras Delfina juega.
—¿Tenés proyectos pendientes?
—Tengo muchos objetivos en lo laboral. Siento que recién empiezo y me falta mucho. Por otro lado, formé una familia divina y estoy feliz por eso. Lo que faltaría quizá es un hermanito para Delfina.