Con el calor, se intensifican las fumigaciones contra el dengue

En plena escalada de calor, el plan de fumigaciones contra el dengue comenzó un proceso de intensificación en distintos espacios públicos y sectores estratégicos de la ciudad.
Acompañadas por la campaña de concientización, dichas tareas se llevan adelante en doble turno: por la mañana en las zonas del casco urbano y durante la tarde en las distintas localidades del partido.

Articulado entre las áreas de Salud, Control Ciudadano y Protección Civil, este acrecentamiento de las tareas contra el mosquito transmisor de la enfermedad abarca las diferentes plazas, parques y demás espacios verdes y públicos. “Es un nuevo cronograma de fumigación, tras haber concluido las tareas en todo el Partido”, dijo Enrique Rifourcat, secretario de Salud local.

“Completamos nuevamente toda la zona oeste y durante los últimos días reforzamos la zona norte, llevando adelante operativos en Ringuelet, Savoia, Tolosa, Villa Castells, Los Porteños, El Rincón y Gonnet".

El operativo diario está acompañado por un refuerzo de las diferentes medidas hogareñas para evitar la proliferación del mosquito Aedes aegypti. Estas incluyen el empleo de repelentes (aerosoles, espirales o tabletas) cada cuatro horas, la colocación de tules sobre cunas y cochecitos de bebé y el uso de mosquiteros en las habitaciones sin aire acondicionado. También son importantes el tapado de los tanques bajos, el descarte de las cubiertas en desuso (o su almacenado bajo techo) y adoptar la costumbre de dar vuelta los recipientes que puedan contener agua.

“Trabajamos en la concientización de los vecinos, apelando a la responsabilidad individual de las familias para prevenir la propagación del mosquito transmisor”, dijo Paola Miceli, la directora de Zoonosis municipal. “Les insistimos en la importancia que tiene realizar el descacharrado en sus hogares, vaciando o deshaciéndose de todos los recipientes que puedan acumular agua. El mosquito puede poner huevos en cualquier casa, solo debe encontrar un lugar que junte agua para dejar sus huevos y reproducirse”.

En el ámbito del hogar, los lugares más frecuentes donde el insecto puede montar su criadero son patios externos e internos, fachadas rotas con recovecos, cocinas, comedores, lavaderos, depósitos de materiales, baños, cocheras, entrepisos, balcones, maceteros, piletas rotas u obturadas que generen charcos, tanques de agua sin tapa, muebles en desuso y terrazas. En los barrios, por su parte, el ciclo evolutivo del mosquito se puede detener controlando la aparición de microbasurales, vehículos en desuso, malezas, veredas rotas o desniveladas, canaletas rotas o tapadas, desagües rotos o tapados, caños rotos, charcos, recipientes de residuos sin tapa, envases de plástico o vidrio y árboles caídos.