UNLP
Conflicto en Medicina: alumnos toman clase pública en la vereda
Reclaman un segundo recuperatorio para las materias de primer año. Aunque fue aprobado por el Consejo Superior de la UNLP, el cuerpo de profesores lo rechaza
El conflicto en Medicina entre profesores, alumnos y el Consejo Superior de la UNLP no avizora una solución concreta.
Tras la remoción del antiguo ingreso, los estudiantes del año inicial cursaron libremente las primeras materias troncales y, al momento de rendir los finales, se encontraron con un bochazo masivo.
Luego de un fracaso generalizado en el recuperatorio, aduciendo una voluntad restrictiva por parte de las autoridades de la Facultad, los estudiantes y un grupo de profesores elevaron al Consejo Superior la solicitud de una nueva oportunidad que les evitara perder el primer año de carrera. El Consejo, finalmente, falló a favor del alumnado y autorizó un segundo examen que cumpliera con una serie de requisitos, los cuales incluían, por ejemplo, la presencia de veedores externos.
El viernes 5 los profesores enviaron a Hoy una declaración conjunta en la que rechazan “terminantemente la injerencia inadecuada del Consejo Superior, superando largamente sus atribuciones y competencias en temas netamente académicos de la Facultad de Ciencias Médicas. El hecho ha sido considerado por los profesores de esta casa como una intervención de hecho”.
Con la resolución en suspenso y el problema agravándose, ya que las materias complementarias comienzan a cursarse y los alumnos corren riesgo de perder el año, un grupo de estudiantes tomó ayer al mediodía una clase pública con apoyo de algunos docentes frente al edificio de la facultad, sobre la avenida 60, en la que expresaron su postura.
“El número más grande de alumnos bochados se dio en Anatomía, es más del 90%. A diferencia de los profesores, el número que nosotros contamos es el que se inscribió y arrancó a cursar. Incluimos a los que desertaron, ya que lo hicieron porque no fueron correctamente formados, no les dieron las clases ni las herramientas correctas”, expresó Rocío Mereles, presidente del centro de estudiantes de la Facultad.
Por fuera de la actividad política, aunque apoyando la medida, la estudiante Yésica Sintioli expresó: “Los exámenes son restrictivos, no pueden durar 10 o 15 minutos. Tampoco nos gusta el tema de las cursadas: tenemos clases cada 15 días en materias que necesitan mucho más tiempo y un seguimiento permanente”.
Hoy por la mañana se efectuará una reunión clave del Consejo Directivo que podrá sumar un nuevo episodio a este conflicto.
