Cumbre mundial por el clima
Representantes de 200 países intentarán alcanzar un acuerdo conjunto sobre la reducción de emisiones de gas con efecto invernadero.
La Cumbre de Naciones Unidas sobre Cambio Climático comenzó ayer en Doha, Qatar, con la participación de unas 17 mil personas. El objetivo es evaluar los progresos de los distintos países en la reducción de la emisión de los gases de efecto invernadero.
Los negociadores esperan ponerse de acuerdo en una extensión del protocolo de Kyoto, el actual pacto que compromete a los países con mayores riquezas para que reduzcan las emisiones de carbono, responsable del calentamiento del planeta. Visto que el protocolo expira al final de este año, varios países quieren extender más allá de la fecha señalada sus asignaciones de emisiones de carbono que no han utilizado, entre ellos Estados Unidos, Japón, Australia y Canadá. Pero agrupaciones activistas enuncian que este excedente, calculado en unas 13.000 millones de toneladas de dióxido de carbono, podría hacer que las futuras promesas para reducir las emisiones carezcan de significado.
La conferencia se prolongará hasta el 7 de diciembre, y su elección de la sede fue una sorpresa, ya que Qatar -rica en petróleo y sobre todo en gas- tiene una de las emisiones de carbono per cápita más altas de todo el mundo.
Según las últimas mediciones, habrá un aumento de la temperatura global de entre 3 y 5 grados centígrados este siglo si no se actúa en forma urgente. El estudio, realizado por el Informe sobre la disparidad en las emisiones, fue elaborado por 55 científicos de 20 países y coordinado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).
