La queja de los vecinos

Edelap: ¿hasta cuándo?

La situación es asfixiante para miles de usuarios del Gran La Plata que padecen, a diario, la desidia y la ineficiencia de la empresa distribuidora de electricidad. ¿Cuál es el límite ante el atropello a un derecho ciudadano?

Tener acceso a la energía eléctrica es una de las necesidades básicas de cualquier hogar para que sus habitantes desarrollen condiciones de vida digna. Pero ¿qué pasa cuando la empresa distribuidora no cumple con la obligación de garantizar el suministro? 

Los platenses padecen al ritmo de la ineficiencia y la desidia de Edelap. La situación se vuelve más opresiva por un agravante: la ausencia de la empresa para escuchar los reclamos de los usuarios.

Así las cosas, la escena se vuelve dramática: no hay un interlocutor y no existe una voz responsable que contenga las justas querellas de los afectados. Es como lidiar con un fantasma que se expresa en dos dimensiones: la oscuridad y la ausencia total.

Desde los organismos de control admiten la existencia de una suerte de agujero negro en la normativa para condicionar a la empresa, a la hora de atender las demandas de los usuarios. 

Se conjugan, entonces, la inoperancia técnica de Edelap y esta suerte de vacío legal. Un combo que, por supuesto, atenta contra los derechos de los ciudadanos a disponer de un servicio digno. Que de todas maneras deben pagar.  

Hoy salió a la calle y comprobó la indignación de los vecinos con la empresa. La situación es extrema y la pregunta cae por su propio peso: ¿hasta cuándo?    

LA INDIGNACION EN PRIMERA PERSONA

Silvina Alanis

Estudiante, 19 años (centro)  

“El servicio es pésimo. Es la única palabra con la que calificaría a esta empresa. Las tarifas son muy altas. Veníamos pagando algo así como 100 pesos o 150 y se nos fue a 400. Es una locura que uno pague tanto por un servicio que anda mal” 

Fiorella Barreto

Comerciante, 32 años (centro)

“Aunque subió la luz, el servicio sigue siendo el mismo de siempre. En el verano se me corta constantemente y pierdo mucha mercadería. Un verdadero desastre. Intuyo que este verano va a pasar lo mismo, como siempre”

Juan Manuel Emery 

Empleado, 33 años (Gonnet)

“Mi experiencia es que en Gonnet hay una falencia importante, porque hay cortes permanentes. Yo sufrí con el tema de la heladera, que se murió por los cortes reiterados. La plaqueta me salió tres mil pesos”

Mirella Carloni

Empleada, 34 años ( zona norte)

“En el verano se me corta diez veces por día. Se me quemó la heladera y nunca se hicieron cargo. Hice el reclamo pero es luchar contra un sistema que no te da pelota. Una locura. El servicio es decadente”

Mauricio Rosas

Comerciante, 60 años (barrio Catedral)

“Es un servicio totalmente colapsado. Es terrible. Yo tengo una pescadería y la vez pasada hice un reclamo: vinieron a las 24 horas. Para que te des cuenta la importancia que le dan. Si pierdo la cadena de frío tengo que tirar la mercadería. Pago por un servicio que no me brindan”

Néstor Berisso

Jubilado, 87 años (barrio Catedral)

“Con Edelap he tenido problemas y sigo con los mismos dramas. No resuelven nada. En la zona, los principales problemas tienen que ver con los cortes que son permanentes. Se nota que no hubo inversión”

Alejandro Mazzoni

Artista, 34 años (Gonnet)

“La verdad es que el servicio es malo. Se puede caer un fusil o lo que sea y te quedas sin luz en cualquier momento. Los cortes me traen problemas y tengo que tirar cosas de la heladera. Le pasa a toda la gente”

Sabrina Lavecchia

Empleada, 28 años (Tolosa)

“Hace poco tuve inconvenientes con el servicio y estuve una semana seguida con el mismo problema: se cortaba a la tarde y volvía recién a la madrugada. Hacíamos el reclamo, nos decían que tenían un problema general en la zona, pero todos los días se repetía”

Valentina Disario

Empleada, 24 años (Olmos)  

“En Olmos tenemos problemas con un transformador que hay en la esquina de mi casa y se corta muy seguido la luz. Por ahí estamos un día entero sin energía hasta que vienen a arreglarlo. En verano con los cortes de luz y sin poder usar ventiladores nos morimos de calor”