SUBE: adhesión parcial al paro de kiosqueros

Comerciantes reclaman que se aumente la comisión por cargar la tarjeta. Bajo acatamiento a la medida en la ciudad

Los usuarios del transporte público encararon con cierta incertidumbre la mañana de ayer, preocupados por si podrían o no cargar la tarjeta SUBE debido al paro de 72 horas que iniciaron los asociados a la Cámara de Kiosqueros Unidos (CKU) por el sistema de recarga. Para suerte de los pasajeros desprevenidos, la adhesión a la medida de fuerza convocada en todo el país resultó ser parcial en nuestra ciudad, de modo que, al menos en el centro platense, la mayoría de los locales prestadores del servicio trabajaron con normalidad.   

Según denunció el presidente de otra entidad, la Unión Kiosqueros de la República Argentina (UKRA), Néstor Palacios, la poca adhesión se debió a que hubo “aprietes” a kiosqueros de parte de Nación Servicios, la empresa del Grupo Banco Nación especializada en brindar soluciones tecnológicas y comerciales para medios de pago. Por este motivo, Palacios, quien admitió compartir la demanda, criticó a la CKU al advertir que la medida se tomó sin haber evaluado sus “ consecuencias”, como la eventual “quita del servicio” a los kioscos como represalia por el cese de recargas.

En torno a este dilema, Micaela, empleada de un kiosco ubicado en calle 7 entre 48 y 49, explicó que no hicieron paro pero que “desde la central nos cargaron muy poco saldo, así que casi no pudimos prestar el servicio en todo el día”. Además, admitió que cobran un adicional de un peso por la carga, aunque “eso no hace a la ganancia del kiosco”. Cabe recordar que la CKU declaró la huelga para reclamar al Gobierno que aumente del 0,20 por ciento al 15 por ciento la comisión que reciben los kioscos por cada recarga.

“Nosotros estamos cargando para que la gente no se quede sin servicio y porque no podemos dejar de hacerlo. Sin embargo, esto no tiene rentabilidad y ya se hizo un planteo desde la Cámara de Agencieros. Me parece que el 15 por ciento que piden los kiosqueros es una barbaridad, pero al menos una comisión de 3 por ciento no estaría mal. Esto no es una ONG, es un negocio”, explicó, por otro lado, el dueño de una agencia de quinielas de calle 46 entre 7 y 8. 

Repercusiones en los usuarios

Karina Sánchez

“Anoche me enteré del paro y ya no tenía crédito, así que todavía no sé qué voy a hacer. Tal vez le pida a algún pasajero que me pague el boleto y le entregue el dinero. De última, me iré a cargar crédito a las oficinas de SUBE en Plaza Italia”.

Isabel Ruviarte

“El paro no me influyó para nada porque trato de tener la tarjeta siempre cargada. Suelo ponerle entre 100 y 200 pesos por las dudas de que puedan pasar cosas como estas. Algunos kiosqueros me han cobrado hasta 5 pesos por la carga de la SUBE, y tuve que acceder porque no tenía otro lugar donde cargar. Para mí tienen que tener su ganancia, pero que eso no repercuta en nuestro bolsillo”.

Mónica Garzo

“Me enteré por una vecina y, cuando fui a cargar, la kiosquera tampoco sabía nada. Cargué saldo suficiente, es más, desde que salió este sistema nunca tuve que usar el saldo negativo que te presta la tarjeta. Soy muy precavida”.

Noticias Relacionadas