Una alternativa al canon: la emergente literatura platense

Una cada vez más abundante lista de escritores formados en La Plata conforman una nueva camada de narradores y poetas en el escenario de la literatura contemporánea. Franco Dall’Oste, José Supera, Francisco Magallanes, Carlos Ríos y Ulises Cremonte son solo algunos ejemplos. En la ciudad de las diagonales, El Espacio, ubicado en diag. 78 esquina 6, es el lugar donde convergen una serie de sellos y proyectos independientes que de manera autogestiva publican novelas, narraciones y poemas nacidos al calor de la vida y costumbres propias de la región, peleando por un lugar en el campo intelectual dominado por el mainstream del mercado porteño.

“Creo que narrarnos a nosotros mismos es una postura sumamente ideológica”, explicó Franco Dall’Oste, periodista, docente universitario y autor de La huevósfera, novela editada por el sello Club Hem, que describe de manera sagaz el mundillo de la cultura universitaria platense, y agregó: “Construir nuestros propios mitos implica poner la mirada en nosotros, dejar de centralizarnos en culturas externas y comenzar a representarnos localmente”.

Selfie, del periodista y docente universitario Ulises Cremonte, es una muestra clara de esta especie de manifiesto estético que reúne a varios escritores nacidos en las calles y avenidas de La Plata. La originalidad de esta narración hecha a retazos de descripciones aleatorias radica en que en ella el autor logra tematizar los cambios acaecidos en las relaciones interpersonales a raíz del uso y abuso de las redes sociales. “En Selfie me dediqué a mirar las fotos de Facebook que estuvieran en el muro de alguien con el que tenía un contrato de amistad”, dijo Cremonte y agregó: “En nuestra cultura, pocas cosas están más limitadas que la mirada”, poniendo sobre la mesa el interrogante de si la subjetividad en la percepción del otro convierte a las propias impresiones en una realidad o en pura ficción. 

La lista de escritores de la nueva narrativa platense continúa. Docentes, periodistas y poetas, dispuestos a convertir a la ciudad en una nueva meca cultural, como lo fue la alegre París de Hemingway, emergen hoy peleando por un espacio en el campo intelectual. Un fenómeno que adquiere cada vez más fuerza y que anima a afirmar: ni Boedo, ni Florida. La Plata. 

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