Alemania: el hermano de Benedicto XVI, vinculado al abuso de 547 chicos en un coro católico

Se denunciaron al menos 67 violaciones en el coro de la Catedral de Ratisbona, que fue dirigido por Georg Ratzinger durante 30 años

Al menos 547 nenes del famoso coro católico de la Catedral de Ratisbona sufrieron maltrato físico por parte de maestros o sacerdotes y 67, agresiones sexuales. Los hechos ocurrieron entre 1953 y 1992, según un informe difundido este martes y que había sido encargado por la Iglesia para esclarecer el caso.

Estas cifras son ampliamente superiores a las publicadas en enero de 2016, cuando un informe intermedio habló de 231 víctimas entre los nenes que cantaron en el coro Regensburger Domspatzen (los gorriones de la catedral de Ratisbona). En febrero de 2015, las autoridades católicas locales solo habían reconocido 72 casos.

El abogado Ulrich Weber, autor de la investigación, presentó las conclusiones de su trabajo, en el que se constata que los responsables de la escuela debieron tener al menos "conocimientos superficiales" de lo que estaba ocurriendo, entre ellos también Georg Ratzinger, hermano del papa emérito Benedicto XVI, que fue director musical del coro entre 1964 y 1994.

"Una cultura del silencio"

El clérigo de 93 años aseguró que no tuvo conocimiento de abusos sexuales en la institución y calificó de "locura" las informaciones que empezaron a circular sobre los abusos.

Según Weber, el hermano del papa emérito estaba al corriente y habría "mirado hacia otra lado", ya que reinaba una "cultura del silencio" en el seno del coro, donde parecía primar la protección de la institución, según el abogado.

El letrado explicó que las agresiones se concentraron en la sección primaria del internado, en la localidad de Regensburg. Las víctimas describieron su paso por este coro milenario y mundialmente conocido como "una prisión, un infierno y un campo de concentración", "el peor momento de su vida, marcado por el miedo, la violencia y la angustia", declaró Weber.En 2010, un exmiembro del coro, el director de orquesta y compositor alemán Franz Wittenbrink, habló a la revista Der Spiegel de la violencia de Georg Ratzinger y de un "sistema de castigos sádicos vinculado al placer sexual".

Weber censó casos de abusos sexuales que van desde caricias a violaciones, así como castigos físicos tales como palizas, bastonazos y golpes con todo tipo de objetos, fueran llaveros o gruesos anillos, o privación de alimentos.