Crisis lechera: los tamberos salen a la calle

Hoy se movilizan en diferentes puntos del país para reclamar soluciones “urgentes”; pedirán que se declare la “emergencia económica” y la “inmediata recuperación” del precio pagado al productor

Con el kircherismo profundizamos nuestra crisis. Con el macrismo todavía no tenemos esperanzas de futuro”, es el diagnóstico casi unánime de los tamberos, que hoy se movilizan en el marco de una Jornada Nacional de Protesta en diferentes puntos del país y frente a las grandes usinas lácteas para reclamar soluciones “urgentes” a las dificultades que atraviesa el sector.

Integrantes de la Mesa Nacional de Productores de Leche (MNPL) se reunieron el viernes con autoridades del Ministerio de Agroindustria de la Nación para evaluar la situación del productor lechero. En ese encuentro, los productores plantearon que se declare en emergencia económica a la producción primaria de leche; la inmediata recuperación del precio pagado al productor (que tiene $4 de costo y recibe $2,50 por litro de leche, mientras que en góndola se paga alrededor de $17); que se extiendan las compensaciones percibidas en montos y plazos.

También pidieron que se mejoren las condiciones de financiamiento otorgando plazos de gracias mayores a un año; que se trabaje activamente con la Secretaría de Comercio en el marco de la Ley de Defensa de la competencia para otorgarle mayor transparencia a la comercialización de leche cruda y productos lácteos, e impulsar el estudio de comercialización pendiente desde diciembre de 2007.
Según informó la MNPL, las autoridades prometieron que habrá respuestas concretas en los próximos días, pero los tamberos justifican la jornada de movilización en “la urgencia de soluciones ante la angustiante situación que están viviendo los productores de leche en las diferentes cuencas productivas; el objetivo es poner en evidencia el avasallante avance de la industria y del sector comercial en detrimento de nuestra actividad”.
 
También, los productores dieron a conocer un informe elaborado por la Fundación PEL, que determinó que la participación del tambo en el precio de la leche en las góndolas pasó del 30,8% en enero de 2015, a un 22,4% en diciembre último, quedando la diferencia para la industria y los supermercados.

Como para contrarrestar este mal humor, el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, anticipó que su cartera podría comenzar a comprar leche a través de un fideicomiso, para comenzar a quitar del mercado los excedentes de producción que deprimen los precios que cobran los productores. Además, incrementó de 30 a 40 centavos los subsidios por litro. Pero estas medidas, aunque “muestran cierta inquietud por nuestra crisis, en absoluto la resuelven, son insuficientes”, le dijo a Hoy el presidente de la Unión General de Tamberos, Emiliano Amondarain, quien concluyó con un panorama desolador: “En los últimos 12 años cerraron cinco mil tambos y se perdieron más de 25.000 puestos de trabajo. Alguien tiene que detener esta espiral dramática”.