Junín: picadas ilegales de motos burlan a la policía y suma adeptos en la web

Viernes, sábados y domingos. Las picadas ilegales siguen, los pibes descontrolan, atentan contra la vida misma, aceleran contra la calidad de vida que va deteriorándose en la ciudad y, para colmo, en el centro de la ciudad los agentes paran a otros motoqueros… los que tienen conciencia, y en su mayoría, los papeles en regla.

Pero las picadas en Junín “ya no se trata sólo de un grupo de jóvenes durnte algunas horas de la madrugada, que busca provocar a la Policía y los agentes de tránsito (…) tal vez la constancia en el tiempo fue lo que logró convertir a estas carreras clandestinas en una especie de subcultura con su propio léxico, conductas, rasgos distintivos y hasta un estricto protocolo durante cada noche en la que operan”, menciona en su informe dominical el diario Democracia.

Un claro ejemplo de esta situación es el grupo de Facebook "Picadas del posada" –por el lugar de cita, uno de ellos está en Circunvalación y Posadas–. También se encuentran en la ruta 65 y la 188, la ruta 7 o Ramón Hernández.

Al no ser motos de marca, hay muchos factores que predisponen al accidente, y por citar un ejemplo, la "preparación" de estos rodados consiste en tratar de adaptar piezas de otros de mayor cilindrada o una tecnología mejor al motor de los modelos genéricos, como el carburador, el filtro de aire o la tapa de cilindros.

A sus propias motos las llaman "la chorra", expresión en la que el mundo marginal está presente.

Además, hay algunas pruebas, como el “colín”, que vuelve más peligroso el andar, poniendo en peligro a terceros. El ritual se completa en la web, donde los jóvenes suelen compartir sus fotos.