La inflación, la principal preocupación de los candidatos a presidente

La disparada de precios y la asfixia impositiva fueron las preocupaciones comunes de siete de los candidatos presidenciables que participaron de una cumbre en la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

Ante miles de referentes del sector privado, los políticos expresaron sus propuestas de cara a 2015.

Participaron  Mauricio Macri, del Pro; Daniel Scioli, del Frente para la Victoria, los cuatro postulantes del Frente UNEN: Hermes Binner, Julio Cobos, Elisa Carrió y Ernesto Sanz, Sergio Massa , del Frente Renovador;

Como era de esperarse, todos los candidatos, excepto Scioli, dejaron traslucir sus críticas a la administración kirchnerista y plantearon la necesidad de torcer el rumbo en las próximas elecciones ejecutivas.

Por su parte, el Gobernador de Buenos Aires defendió el proyecto nacional y popular y dijo que, en caso de suceder a Cristina Fernández, encabezará la etapa del "desarrollo" del modelo.

"Yo sé que vienen los candidatos acá y les proponen que van a bajar los impuestos. Son los mismos que les dicen a los del campo que van a sacar las retenciones y que les dicen a los gremios que van a aumentar un 200 por ciento los salarios", sostuvo Scioli.

Luego agregó: "Yo quiero ser más serio y más responsable". En todo momento, el gobernador aclaró que si él llegaba a la presidencia, no tenían que esperar que la gestión arrancara desde cero. "Ahora viene la etapa del desarrollo. Pero esto es posible por todo lo que se hizo hasta ahora", expuso.

Es que los seis opositores que hablaron antes coincidieron en proponer una rebaja impositiva.


El jefe de gobierno porteño, que abrió el encuentro a las 10.30, fue más allá y propuso una reducción progresiva de las retenciones a la soja hasta su eliminación total en un plazo de siete años. "Con el crecimiento que vamos a generar, vamos a tener la misma recaudación que en este momento", argumentó, tras ganarse los aplausos de los presentes.

Ese planteo fue uno de los que respondió más tarde Scioli, al ser consultado por la prensa.

Cobos cuestionó lo que calificó de una "presión tributaria récord", Sanz pidió un tratamiento impositivo diferencial para las pymes, Carrió propuso que pagaran "todos, pero poco" y Binner se quejó de que cada vez se ponían más impuestos. El ex gobernador de Santa Fe fue, sin embargo, uno de los más cautos al hablar de reducción impositiva. "Sin impuestos es muy difícil llevar adelante un gobierno, por no decir imposible", destacó.

Con un estilo descontracturado y directo, Carrió fue la más aplaudida por los empresarios, a quienes no tuvo temor en enfrentar. "Ustedes le dan la confianza a cualquiera, menos a mí. Se enamoraron de Boudou y la Mancha de Rolando y a mí no me quieren votar", les dijo, en tono de broma. Al notar que generaba risas en el auditorio, continuó: "Afuera soy considerada una de las grandes intelectuales y adentro soy despreciada, y ustedes, sin darse cuenta, repiten ese desprecio, porque están colonizados por los sátrapas".