Provincia
Las amenazas de bomba ya son un boom
Identificaron de dónde provino la llamada intimidatoria realizada anteanoche a la Gobernación bonaerense. El culpable habría sido un preso alojado en un pabellón de “buena conducta” de la Unidad Nº9. Reforzaron las medidas de seguridad en la sede donde cumple funciones María Eugenia Vidal, quien anoche recibió otro ataque telefónico
La llamada anónima a la línea de emergencias 911 que anteanoche amenazó con “reventar” la gobernación de la Provincia de Buenos Aires, noticia que fue primicia de diariohoy.net, fue hecha desde un pabellón de la Unidad Carcelaria Nº9 de La Plata, por lo que ahora se trata de identificar al preso que puso en vilo a cientos de trabajadores y funcionarios, ya que ayer a la mañana la sede mencionada tuvo que ser evacuada.
“El llamado se hizo este domingo, alrededor de las 20, del teléfono que funciona en el pabellón de buena conducta de la Unidad N°9”, detallaron las fuentes consultadas y agregaron que a esa certeza “se llegó por el trabajo de los investigadores y de peritos en comunicaciones”.
La amenaza con una voz masculina advertía: “Mañana (por ayer) le vamos a reventar el gobierno a Vidal”. En tanto, la fiscal platense que interviene en el caso, Leyla Aguilar, dijo que “las actuaciones se iniciaron de oficio” y que durante toda la jornada ordenó “distintas pericias y diligencias para ubicar al responsable del llamado telefónico”.
Anoche, a las 21.03, el 911 recibió otro llamado donde una voz masculina pronunció: “Mañana (por hoy) les exploto todo el edificio de Vidal”. Por ende, se inició una nueva investigación.
Respecto a la llamada del domingo, las autoridades penitenciarias analizaban anoche las cámaras de seguridad para identificar al recluso que realizó la llamada intimidatoria, el cual ya estaría identificado.
Por este incidente, la seguridad de la Gobernación bonaerense fue reforzada ayer. Voceros policiales indicaron a Hoy que “recargaron a más policías para la vigilancia del edificio y para controlar y revisar en forma exhaustiva a los visitantes de la Casa de Gobierno”.
“Todos los días hay un perito en explosivos que revisa las instalaciones, pero hoy (por ayer) trabajaron tres especialistas. Evacuaron el establecimiento y buscaron en las oficinas y vehículos la presencia de algún artefacto extraño, pero no hallaron nada”, relató un jefe de la fuerza a Hoy.
Al parecer van a destinar más detectores de metales, que se incorporarían al ya instalado en el ingreso al hall, ubicado en la entrada por calle 6, 51 y 53.
Por el hecho se inició además un seguimiento policial en la Dirección de Investigaciones de La Plata, con sede en calle 61 entre 12 y 13: los investigadores pudieron rastrear el número desde el que salió el llamado, aunque al comunicarse a ese teléfono recibieron un mensaje conocido: “La línea no está habilitada para recibir llamados”. Luego se supo que provenía de un establecimiento carcelario. Fuentes cercanas a la gobernadora buscaron bajarle el tono al episodio. “La actividad en calle 6 fue normal y así se desarrolló la jura de Joaquín de la Torre como ministro de Producción de la Provincia de Buenos Aires en el salón principal”, indicó una fuente oficial.
Una seguidilla de intimidaciones
La Casa Rosada, donde tiene sus oficinas el Presidente Mauricio Macri y gran parte del Gabinete nacional, sufrió desde mediados de julio al menos tres amenazas de bomba. Los llamados intimidatorios, que provocaron suma tensión y preocupación, resultaron falsas alarmas.
El 14 de julio se determinó, luego de extenuantes horas de trabajo de los especialistas en explosivos de la Policía Federal, que no había ningún artefacto peligroso. Un episodio similar sucedió el viernes 12 de agosto y otro más se dio cinco días después.
Además, la vicepresidenta Gabriela Michetti también fue amenazada en varias oportunidades. En la línea de la Fundación SUMA (donde se recibió la amenaza) quedó grabado el mensaje anónimo que insultó e intimidó a la vicepresidenta, horas después de que se conocieran datos sobre SUMA, en el marco de una denuncia por el origen de los fondos que le robaron a Michetti de su casa la noche en que Cambiemos ganó el balotaje en noviembre de 2015. “Comprate vos también un auto blindado porque vas a volar por los aires”, advirtió una voz en el teléfono fijo de SUMA.
Además, recientemente se confirmó la amenaza, con 11.000 llamadas al 911, anunciando un ataque con una bomba contra el departamento que es propiedad del Presidente, ubicado en la Avenida del Libertador al 2700, donde actualmente vive el titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas.
El uso de los teléfonos en las cárceles
Los presos de las cárceles bonaerenses, por lo general, tienen acceso al uso de un teléfono público ubicado en cada pabellón, desde donde pueden comunicarse con el mundo exterior utilizando una tarjeta.
La idea es que los sujetos privados de libertad puedan comunicarse por teléfono con sus familiares y allegados. Sin embargo, algunos lo usan para cometer delitos: secuestros virtuales o amenazas.
A través de la cámara de seguridad interna de la cárcel podría determinarse quién hizo uso del teléfono público en el horario del llamado al servicio de emergencias 911. Si los investigadores logran identificar al amenazador, este sumaría otra causa penal en su contra: “amenaza calificada y atentado contra la autoridad”.
El artículo 9° de la Ley de Ejecución Penal bonaerense, N° 12.256, establece los derechos de los privados de libertad, y en el inciso 5° dice: “Comunicación con el exterior a través de: a) Visitas periódicas que aseguren el contacto personal y directo con familiares, representantes legales y con otras personas, especialmente con sus padres, hijos e hijas, y con sus respectivas parejas, en la forma que establezca la reglamentación; envío y recepción de correspondencia y comunicaciones telefónicas a su costa”.