Murió otro referente barrial de la Villa 31 a causa del COVID-19

Agustín Navarro tenía 57 años y coordinaba un merendero. Falleció una semana después que Ramona Medina, otra de las referentes barriales. Ya se registraron unos 2.600 casos en las villas porteñas.

Agustín Navarro murió este lunes a causa del coronavirus. Era un referente social que coordinaba el funcionamiento de un merendero en la Villa 31. La muerte del hombre de 57 años fue confirmada por la agrupación Barrios de Pie mediante un comunicado en las redes sociales.

El merendero en el que Navarro trabajaba desde hacía varios años se llama Otti y allí acuden diariamente entre 50 y 100 chicos a tomar la leche.

Según explicaron desde la organización social, la mujer de Navarro, sus tres hijos, su yerno y tres nietos se encuentran ahora aislados en su casa dentro del barrio por prevención. Su hija Verónica ya dio positivo y el resto se realizará el hisopado esta semana.

Navarro fue diagnosticado hace unos diez días, primero fue aislado en un hotel en Recoleta y luego en el Hospital Ramos Mejía. Su cuadro se complicó porque también padecía problemas respiratorios.

De esta manera, falleció apenas siete días después que Ramona Medina, otra referente barrial, de 42 años. Ella había sido una de las caras del reclamo contra el Go­bierno porteño por la falta de agua potable en plena pandemia.

Al igual que Ramona, actualmente la familia Navarro no tiene agua y depende del operativo de AySA. “Ahora hace un par de días que no tienen agua, es intermitente el problema” explicó Walter, coordinador de Barrios de Pie en Capital.

Según el último parte difundido ayer por el Ministerio de Salud porteño, en Capital se registraron un total de 6.660 casos positivos y 189 víctimas fatales.

Estos casos se concentran en los barrios populares, y la Villa 31 y la 1-11-14 son las más afectadas, con unos 2.600 positivos y 22 muertes registradas.

A fines de abril, grandes sectores de la Villa 31 y 31 bis en el barrio porteño de Retiro quedaron sin agua. Mientras, las estadísticas oficiales confirmaban la llegada de la pandemia de coronavirus a las barriadas pobres de la ciudad de Buenos Aires y el número de casos empezó a crecer de forma dramática en casi todos los barrios populares.