La Facultad de Ingeniería trabaja para mejorar los implantes dentales
Muchas veces, los implantes en el cuerpo acarrean problemas de salud, por ejemplo cuando el organismo los rechaza. Un grupo de investigadores del Laboratorio de Investigaciones de Metalurgia Física (LIMF) del departamento de Ingeniería Mecánica de la Facultad de Ingeniería de la UNLP trabaja para mitigar estos efectos en los implantes dentales de titanio.
Bajo esa consigna, se propone
optimizar los procesos de integración al hueso de los implantes dentales de titanio, mediante recubrimientos superficiales sobre este metal, denominados bioactivos. El propósito es que mejore la interacción con el medio biológico y de ese modo se facilite la biointegración, es decir, la unión al hueso del cuerpo humano.
El ingeniero Pablo Bilmes, codirector del proyecto junto al ingeniero Carlos Llorente, explicó: “Es muy común, cuando se hace un implante, esperar un tiempo de entre tres y seis meses a partir de esa aplicación, para que ocurran los mecanismos que tienen que ver con la generación de tejido óseo y la fijación del implante, biológica y mecánicamente, lo que se conoce como osteointegración”.
En esa línea, añadió: “Para lograrlo, investigamos las características que tienen los recubrimientos de titanio y cómo dotarlos de las mejores aptitudes para mejorar en tiempo y forma esa respuesta biológica”. Además, agregó que una de la maneras de conseguirlo “es generar sobre el titanio recubrimientos superficiales bioactivos, para optimizar la interacción con el medio biológico”.
La investigación forma parte de un proyecto interdisciplinario en conjunto con una empresa nacional de dispositivos médicos que ya comercializa los productos. El resto del equipo de trabajo está compuesto por tres investigadores en formación y tres becarios. Por parte de la compañía participan dos odontólogos, un biólogo y dos ingenieros.