¿La última gran ficha del zar del juego K?

Con la compra de Cristóbal López de la productora La Corte más el acercamiento del gobierno a Tinelli para su llegada a la AFA le abren el camino al zar del juego para poder avanzar con las apuestas en el fútbol

Como se reflejó en reiteradas veces en nuestro diario, Cristóbal López no es un empresario más. El zar del juego, que regentea miles de máquinas tragamonedas a lo largo y ancho del país gracias a los favores otorgados por el kirchnerismo, es prácticamente un socio de la familia presidencial, lo que le permite apoderarse de millonarios negocios.

Como se supo días atrás, compró la productora televisiva La Corte. Gracias a esa adquisición, se convirtió en el administrador exclusivo de las apariciones audiovisuales de Cristina Kirchner . El Estado transfirió así la imagen y el sonido de la Presidenta a uno de los empresarios predilectos de la familia presidencial. A su vez, La Corte es la productora que transmite todos los partidos del Fútbol para Todos.

Como se sabe, desde la asunción del kirchnerismo en 2003, López acumuló una fortuna incalculable gracias a los favores de Néstor y Cristina. Creó un imperio basado en el negocio de las apuestas, también avanzó en la explotación de servicios energéticos, adquirió las secciones de refinación y distribución de combustibles de Petrobras, incursionó en la actividad agropecuaria y, desde 2012 también compró un multimedios (Grupo Indalo, que incluye a C5N y Radio 10, entre otros.)

Como hemos reiterado infinidad de veces, este "imperio" hubiera sido imposible sin la promoción sistemática del Estado.

Y en esta jugada el empresario cuenta con un socio clave: Máximo Kirchner. Por eso se reunió en Olivos con Marcelo Tinelli, socio de Cristóbal en Ideas del Sur, secretario de prensa y relaciones públicas de la AFA, y vicepresidente de San Lorenzo. En la comisión directiva de ese club participa Emiliano López, heredero del rey de las tragamonedas.  Al hijo de la Presidenta le gustaría convertir a Tinelli en el nuevo Grondona y de ese modo avanzar con las apuestas en el fútbol. La posibilidad de convertir al país en un gran casino con cada partido de fútbol suena como la gran apuesta final de López en los 8 meses que le restan al gobierno K.

El impresionante avance del negocio del juego es uno de los legados más visibles de la era k reflejado en Cristobal López, que cubre más del 80 por ciento del mercado y donde explota 33 casinos.