Los productores agropecuarios elevaron duros reclamos por la crisis del sector

La situación del campo continúa siendo alarmante y no son pocas las actividades que se vieron resentidas. “El Gobierno tiene que ser parte de la solución”, dijeron a Hoy desde Carbap

La situación expuesta en las últimas horas por el titular de la Sociedad Rural, Luis Miguel Etchevehere, dejó al descubierto un panorama totalmente desolador para el campo y, sobre todo, para aquellos productores que tienen que lidiar con las consecuencias de las malas decisiones tomadas por el Gobierno kirchnerista.

“La descripción de Etchevehere es la descripción descarnada de la realidad del sector. No mintió en ningún punto sobre lo que nos está ocurriendo. Lo de los tambos que se han cerrado es cierto y hay muchas menos vacas. Los tambos grandes se han concentrado más, el tambero chico ha salido del negocio y así en la mayoría de las actividades”, explicó a Hoy el presidente de la Sociedad Rural de Pehuajó -uno de los municipios más ricos e importantes en materia agrícola-, Miguel Folgado.

Folgado indicó también que “el panorama es totalmente preocupante para el campo, porque está soportando una presión impositiva altísima. Y lo que tenemos que agregar es que estamos con una inflación del 25% o 30% por año, así es imposible producir con costos en alza permanente”.

“Además de la menor cantidad de vacas y de tambos, es menor la cantidad de empleos.

Todo esto está ocasionando una pérdida de empleos demasiado alta, con industrias frigoríficas que están cerradas por la pérdidas de diez millones de cabezas. Con cada tambo que se cierra son entre diez o quince personas o familias que se pierden”, subrayó.

En la misma sintonía, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Horacio Salaverri, señaló que “todo lo que ha apuntado el Presidente de la Sociedad Rural es totalmente razonable. Ha habido una merma en el stock por la pérdida que hemos tenido desde el 2007 en adelante”. Y agregó: “No hay recuperación del stock y además no han habido medidas tendientes a esto. Hemos perdido nuestro lugar en la exportación de carnes, prácticamente de 750 mil toneladas hemos pasado a 190 mil toneladas de exportación, así que es preocupante la situación”.
“Han desaparecido casi cinco mil tambos, lo que da una idea de que a aquél tambo chico le ha sido imposible sostenerse, mantenerse y ha desaparecido. Y máxime en estos últimos dos años”, continuó.

El kirchnerismo, en la mira

Tanto Folgado como Salaverri coincidieron en que, frente a este panorama, es necesario que el Gobierno tome cartas en el asunto. Sin embargo, reconocieron que, hasta el momento, ninguno de sus reclamos ha sido escuchado por las autoridades nacionales, e incluso, municipales.

“No hay que hacer grandes cambios: que nos dejen trabajar en libertad y que bajen las retenciones hasta que el país se normalice. Si sacaran las retenciones del trigo se sembraría más y podríamos tener un pan más barato. Si la gente pudiera volver a trabajar sin tener una mochila tan pesada y una presión tan alta, el país empieza a caminar en poco tiempo, porque tiene esa capacidad de reacción que los argentinos ya supimos ver en otra oportunidad. Pero este Gobierno está obcecado en no escuchar a la sociedad y lo que ésta le está diciendo”, apuntó el referente agrario de Pehuajó.

Por su parte, Salaverri acotó: “en cualquier lugar del mundo los gobiernos están para solucionar los problemas y no para enfrentarse con los sectores. El Gobierno tiene que ser parte de la solución y no del problema, ésa es la cuestión”.

Crece la preocupación del sector

Durante la entrevista con Hoy, el titular de la Sociedad Rural de Pehuajó manifestó que, en el interior, la crisis del sector es cada vez más preocupante.

“Con los cierres de las industrias frigoríficas y los tambos no trabajan los camiones, las estaciones de servicio, los talleres que abastecen al sector. Eso deja a las ciudades del interior con una gran preocupación y los únicos que no la ven son los intendentes kirchneristas o los integrantes del Gobierno”, destacó.

En tanto, desde Carbap, Horacio Salaverri (foto) remarcó que “los productores están sumamente preocupados no sólo por el tema de la comercialización, sino también por la presión tributaria”.

“El impresionante aumento de las valuaciones ha hecho que los impuestos nacionales con bienes personales hayan tenido un incremento tremendo y así también los anticipos de los mismos impuestos”, puntualizó.

Aseguran que el negocio agrícola “está complicado” por la suba de costos

El presidente de la Asociación Argentina de Girasol (Asagir), Luis Arias, aseguró que el negocio agrícola para la campaña 2013-2014 “está complicado, por el aumento de los costos de insumos, la caída de los precios de los granos para la nueva cosecha y el retraso cambiario que impacta fuertemente en los fletes, labores y cosecha”.

Arias, productor de General Pico, formuló estas declaraciones en el marco de la Rural de Palermo 2013, donde comentó que “la situación financiera de los productores es complicada porque la rentabilidad de la campaña 2012-2013 fue muy ajustada”.

El flamante titular de Asagir recordó que “el 60 por ciento de la agricultura de Argentina se realiza en sistemas de arrendamientos, siendo significativa la caída de los precios que experimentan los alquileres y la vuelta a los sistemas de asociaciones productivas, tales como aparcerías, aportes de insumos y de labores”.

Además, recordó que “en general la campaña 2012-2013, los rendimientos fueron muy dispares en las distintas zonas agrícolas del país” y explicó que allí “la cosecha fina se vio desalentada por los bajos precios a la siembra y por las trabas comerciales que tiene el trigo”.