Así lo perdió Gimnasia

Gimnasia lo perdió porque jugó mal. Nada de lo que imaginó Pedro Troglio en la semana se pudo plasmar en la cancha, ya que salvo un remate de Noble en el primer tiempo, después prácticamente no pateó al arco. 

El entrenador mantuvo el dibujo y apostó por el buen momento de Faravelli, Noble y Bou por sobre los nombres propios con los que formó el banco de los relevos, y de alguna manera esa apuesta le salió mal. No estuvieron a la altura. Está claro que ante idénticas propuestas tácticas, las individualidades son las que marcan las diferencias y allí Estudiantes fue más. 

Evidentemente la decisión de utilizar a Franco Niell no fue la acertada. El Enano no estaba para jugar, de hecho estuvo en cancha 25 minutos porque se resintió de la lesión, mientras que Antonio Medina, quien había sido uno de los mejores ante San Lorenzo, ingresó muy tarde con el partido casi liquidado. 

Es cierto que el error de Bologna le tiró por la borda todo intento de recuperación en un momento clave. A pesar del 0-1, aún estaba en partido y tras el gol de Auzqui todo se desmoronó, pero llamo la atención que en largos pasajes del encuentro su principal característica o virtud como la presión alta no la haya ejecutado con precisión.   

Sin dudas que un rendimiento colectivo por debajo de la media, e individualidades que no alcanzaron a aprobar, formaron un combo tan lapidario como el resultado final.