El clásico marca la agenda de un febrero cargado de obligaciones para Estudiantes y Gimnasia

Las victorias conseguidas sobre el epílogo de la decimotercera fecha de la Superliga calmó las aguas en Estudiantes y le dio confianza a Gimnasia. Sin embargo, los dirigidos por Facundo Sava y Lucas Bernardi no tienen margen para relajarse en el comienzo del segundo mes del año, en donde el clásico asoma como un punto bisagra para los objetivos de los dos. 

Con más argumentos que especulaciones, el Lobo dio una muestra de evolución al ganarle a Central en el Bosque, con el debut del Colorado en el banco. Detrás de él se esconde la esperanza de miles de hinchas que recuerdan su pasado como jugador enfrentando a 

Estudiantes -que incluye goles y triunfos como aquellos del año 2000-, rival más importante que tendrá por delante en los próximos 28 días.

Antes deberá medirse con Arsenal de visitante y, tras el choque con el León, cerrará las dos fechas siguientes jugando los lunes 19 y 26 de febrero, desde las 21.15, ante Colón en Santa Fe y San Lorenzo en 60 y 118, respectivamente. 

Para el Pincha, el panorama es disímil, ya que además de tener que ir al Bosque a jugar de visitante el clásico, también tendrá el siempre difícil compromiso de arrancar de la mejor forma su 15ta participación en la historia de la Copa Libertadores, debutando como local el miércoles 28 de febrero.

Antes de la presentación en el certamen continental, el León jugará el domingo próximo ante Newell’s, nuevamente en el Estadio Único, tras varios peregrinajes a Quilmes; el sábado 10 enfrentará al Lobo y luego jugará los viernes 16 (ante Unión) y 23 (frente a Huracán). Ambos encuentros abrirán las respectivas fechas de la Superliga. 

El karma de 2017, cuando se quedó afuera en la fase de grupos en la Copa, lo obliga a seguir de cerca al posible rival de la zona que aún no está definido (Banfield es un candidato), pero al mismo tiempo, lo somete a la necesidad de armar dos equipos para afrontar la doble competencia, mientras aspira a posicionarse en zona de clasificación a las copas, luego de la victoria ante el Rojo que le dio aire a Bernardi, más allá de la aceptable campaña que viene realizando.

¿Quién pone más en juego en el mes del carnaval? 

La respuesta tendrá correlato con las consecuencias y decisiones que se tomen luego del derby programado para el 10 de febrero a las 17, a priori en el Bosque, en donde un empate asoma como un negocio tentador para ambos entrenadores, pensando en lo condicionante de una derrota en estos encuentros. 

El Pincha pondrá en juego su histórica racha favorable de siete años sin derrotas y el Lobo buscará quebrarla de una buena vez.