Gimnasia tuvo un estreno alentador

PRIMER TIEMPO

El entusiasmo que generó el inicio del ciclo de Facundo Sava en Gimnasia se pudo traducir en esta reanudación de la Superliga, porque el Lobo saltó al campo de juego del Bosque con un objetivo central: imponer condiciones ante Rosario y sumar los tres puntos.

Prácticamente desde el arranque, ya que no había transcurrido ni siquiera un minuto, el equipo lastimó. Ejerció la presión alta, recuperó la pelota a través de Ezequiel Bonifacio y, tras un centro de Franco Niell a la cabeza de Lorenzo Faravelli, el “6” llegó abajo del arco para mandarla a guardar.

El gol, casi desde el vestuario, le dio otro aire y menos obligación al equipo del Colorado, que pese a parar un 3-3-2-2 se fue modificando el esquema hacia una línea de cinco cuando debió retroceder. De esta manera, se plantó bien en defensa, fue pragmático y buscó las salidas rápidas.

Tanto Nicolás Dibble como Colazo buscaron atacar las espaldas de los laterales, mientras que Niell molestó por todo el frente de ataque; Fabián Rinaudo fue patrón del medio y Alemán se hizo conductor cada vez que la pelota le llegó a los pies.

Más allá de algún que otro centro de Leonardo Gil, o la escapada de Maximiliano González, Rosario Central no generó peligro en el área albiazul.

Desde los 20 minutos hasta los 28 se vio lo mejor del Lobo, pasaje en el que generó un remate de Alemán, un tiro a colocar de Niell y un tiro potente de Faravelli que encontró respuesta en Jeremías Ledesma.

Posteriormente, vino nuevamente el gol: el elenco Tripero apostó al laboratorio y Brahian buscó al ex-Boca tras un córner, quien la agarró de volea y lastimó.

Sin embargo, Central reaccionó enseguida: sacó del medio y Germán Herrera cumplió con la “ley del ex” y durmió a la defensa para conectar de cabeza y descontar. El tanto cayó como un balde de agua fría, porque al instante, Gil mandó un centro, Zampedri conectó y la pelota dio en el caño, evitando el empate.

Los minutos corrieron, el Lobo se acomodó y se fueron al descanso.

SEGUNDO TIEMPO

En el complemento, Gimnasia jugó con la ventaja a su favor: se cerró mejor en defensa y buscó el pase preciso para intentar liquidar el pleito.

A Central le costó generar en ofensiva y los cambios no le dieron resultado, aunque tuvo la más clara a los 20 minutos, cuando Zampedri se filtró entre la defensa, cabeceó y, nuevamente, el palo salvó a Alexis Martín Arias.

El Lobo modificó el esquema, puso dos líneas de cuatro, creció la figura de Alderete en la zona defensiva y Alemán se hizo cargo junto a Niell de aguantar la pelota, generar infracciones y buscar sorprender con alguna escapada. Incluso, el Enano desperdició una clara a los 32, cuando encaró acompañado del ingresado Facundo Pereyra y Colazo, pero se le fue la pelota larga y desperdició un avance muy claro.

Sobre el cierre, los dirigidos por Sava se plantaron bien atrás: Facundo Oreja cuidó su sector, Alderete, Guanini y Coronel despejaron todos los centros y la colaboración de Bolívar, Rinaudo y hasta de Alemán sirvió para terminar festejando un triunfo clave, que renueva las esperanzas en este reinicio del torneo.