Troglio: “Es un delincuente, no sirve para nada”

Enfurecido y sin filtro, Pedro Troglio cargó duro contra el árbitro Pedro Argañaraz, quién cobró un polémico penal que le permitió al elenco velezano avanzar a los cuartos de final de la Copa

Como un déjà vu, el reclamo airoso de Pedro Troglio tras la derrota ante Vélez tuvo similitudes a aquella protesta “cara a cara” a Edgardo Codesal en la final del Mundial en Italia 1990. Fuera de sí, desencajado y con la bronca por un penal polémico que marcó el rumbo del partido, el entrenador albiazul despejó el círculo de jugadores que rodaban a Pedro Argañaraz y lo enfrentó sin titubeos: “Sos un desatre, no fue penal”.

 Lejos de bajar los decibeles, y con las pulsaciones a mil, el entrenador redobló la apuesta cuando se acercó el micrófono de la televisión: “Son unos delincuentes, no sirven para nada, hay que echarlos a los cuatro, no cobró un penal a favor y si lo hizo en contra”, en referencia a la actuación de la terna. 

“Están pasando cosas raras”

Un poco más tranquilo, pero con la misma bronca por la eliminación, el entrenador, ya en zona de vestuarios, se refirió a sus palabras: “Ya está lo que le dije. Ya pasó. Después me tendré que aguantar las críticas”.

Con respecto al penal, dijo: “Navarro llegó a la pelota primero y cobra, pero no hace lo mismo en la acción de Rinaudo. Me llama la atención,  están  pasando cosas raras”.

“Tenemos una bronca bárbara”

Gimnasia jugó mal. Sin embargo, dentro de un contexto de paridad, fricción y nulas acciones asociadas, fue levemente superior al rival. De todas maneras se quedó con las manos vacías y sin la chances de avanzar en una Copa Argentina que era uno de los objetivos primarios del plantel albiazul. 

“Nos quedamos con una bronca bárbara. Vélez no entró al arco, no pateó en todo el segundo tiempo. Lamentablemente se define el partido por un penal que no fue, ya que Navarro llega primero a la pelota”, analizó Osvaldo Barsottini. 

“En el primer tiempo hubo una mano que el árbitro omitió y pudo haber cambiado el rumbo del partido, pero ya está, tenemos que pensar en lo que viene porque tenemos partidos importantes por delante”, finalizó.

Pésimo estado del campo de juego

Las decisiones que toman los organizadores de la Copa Argentina resultan inexplicables. Un cotejo entre un equipo de Capital Federal y otro del gran Buenos Aires, que se haya jugado en la provincia de Córdoba, llamó la atención. Y más aún que el estadio Juan Domingo Perón de Instituto presente un campo de juego en semejantes condiciones.

Sin dudas que el pésimo estado del terreno conspiró contra el desarrollo del partido. Inclusive, el cotejo se demoró un par de minutos al inicio por un inconveniente con una boca de riego en el campo de juego. A su vez, a los 5 minutos tuvo que ingresar un auxiliar para tirar arena sobre el pasto y tapar el bache. Insólito.