Aquel mano a mano del Diario Hoy con don Antonio, la leyenda radiofónica

Cuando tenía 80 años de vida y 65 en los micrófonos, Antonio Carrizo atendió de cuerpo y alma al Diario Hoy. La leyenda de la radiodifusión argentina, la voz autorizada para hablar de literatura y tango, desandó en una entrevista toda una vida con anécdotas que incluyeron a Jorge Luis Borges, el Polaco Goyeneche, Pablo Neruda.

La nota fue titulada "La vida y la radio", siendo tapa de la revista Tiempos de la edición dominical de Hoy del  1º de abril de 2007, que transcrimos a continuación.
 
Si hay alguien autorizado para hablar sobre la radio en Argentina, ese es Antonio Carrizo. Con 65 años de trayectoria en el medio, fue el creador de un clásico de la radiofonía como La vida y el canto, programa que condujo durante décadas y por el que pasaron destacadas figuras del arte y el espectáculo nacional.
Además, es un hombre de la televisión -él tuvo la histórica tarea de inaugurar las transmisiones del Canal 13- e integró recordadas emisiones como Sábados continuados, Polémica en el bar, Tribuna caliente y Toda estrella tiene contra, donde hacía un gran dúo con Juan Carlos Calabró.

Su pasión por la literatura lo llevó a entablar amistad con escritores como Jorge Luis Borges y Pablo Neruda. Su amor por los libros, a armarse de una voluminosa biblioteca privada en la que guarda varios incunables. El tango ocupa otro capítulo fundamental en su vida y en sus audiciones. La noche y la radio lo hermanaron con Roberto “Polaco” Goyeneche, Aníbal Troilo y otros tangueros que hicieron historia, en los tiempos de gloria y veladas interminables en el Caño 14.

Fanático de Boca y defensor a ultranza de los talentosos como Juan Román Riquelme, el nombre de Antonio Carrizo figura inevitablemente en el mundo de la cultura nacional, en las costumbres argentinas de eternas charlas de fútbol, de ídolos, de tango y de la vida. Con una cadencia al hablar en la que se mezclan la influencia de Buenos Aires, ciudad que lo adoptó en 1948, con las raíces pueblerinas de su Villegas natal, Tony  -como lo conocen todos- recibió a Tiempos en su segunda casa: Radio Rivadavia.
Y, como si estuviera al aire, habló con gusto de sus recuerdos, sus amigos, sus vivencias y, por supuesto, de la radio...

-¿Cómo ve a la radio de la actualidad?
-Ahora no hay una radio, hay miles de radio. Hay formas diferentes de hacerla. Nadie sabe qué es lo que se dice; pero no es un caos, es la
diversidad de la vida. Tantos estilos como radios, tantas músicas como oyentes: me parece que no se puede hablar generalizando.
El único estudio posible es que no se puede hacer un estudio. Alguien tendría que escribir sobre las 5 o 6 mil radios de FM que hay en el
país, que han hecho saltar por el aire no sólo el negocio, sino a los oyentes de radio.

-Entonces, ¿qué función cumple la radio hoy?
-La radio hoy es hija de los multimedios, de los holdings, de aquellos que pueden tener diarios, revistas, canales de televisión, porque no es la radio el negocio. Además, en la radio hay un abaratamiento de la opinión política. Por ejemplo, ponen a Dady Brieva, que para mí es un
chico extraordinario, pero te dicen: Si querés informarte bien, ponelo a Dady; y él no es un informador, un periodista. Eso no es otra cosa que esquivarle el bulto a la opinión en un momento muy difícil, y no establecer un análisis serio sobre la situación económica y política.
Entonces la radio no es caos, pero como les gusta decir a los empresarios rurales, el sector vive una gran crisis. No puede ser que en ciudades chicas haya siete FM. Esos oyentes están condenados a escuchar  boludeces de los pibes del pueblo, y así cada vez van a estar menos informados. Y no me digan que son las radios de la libertad, porque son lo contrario; son todas truchas, fuera de la ley, son cualquier cosa menos la radio de la libertad.

-¿Y la televisión?
-La televisión no es un medio de comunicación, es un medio de diversión y de escape. Son pocos los que pueden comunicar: Santo Biasatti, María Laura Santillán... Si alguien quiere saber de filosofía, que lea a Nietzche o a Savater; si quiere saber de literatura, que lea a
Borges. Eso en la televisión no lo va a encontrar. Por el lado del fútbol está mejor, porque los partidos siguen siendo lindos y nunca son todos iguales, y son bastante buenos los programas de discusión futbolística. El de Niembro es buenísimo, el de Palacios y los otros chicos también.

Personajes y leyendas
A lo largo de su trayectoria Antonio Carrizo ha entrevistado a personalidades fundamentales del arte y la cultura. De allí surgieron charlas profundas y jugosas dentro y fuera de un estudio de radio. El recuerdo vivo de esas personalidades, en la memoria del locutor.

Roberto “Polaco” Goyeneche
“Un gran artista. Una duda que toda la vida me ha quedado es cómo un muchacho tan ingenuo e inocente -hasta en sus defectos- era capaz de entender las letras de los tangos como las entendía él. Eso es un enigma; eso es el arte seguramente. A la vez, era un tipo complejo, que se comía las uñas, contaba chistes, tenía una vida que lo destruía y después cantaba”.

Jorge Luis Borges
“Era un hombre medido en la conversación, muy serio, muy austero hasta en sus gustos personales. Un verdadero sabio de la literatura, un escritor extraordinario. Quizás él, con Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa, sean los más grandes escritores de la lengua española en el siglo XX. Borges se sentaba en este estudio a grabar conmigo y nunca me pidió que le adelantara algo o que le escribiera preguntas. Empecemos, me decía,  que si me preparo las cosas no salen bien. Eso era Borges; él era la literatura. Es el más grande que ha dado
la Argentina y de los más grandes de la lengua española. Una vez García Márquez le dijo a Vargas Llosa que reprobaba algunas ideas de Borges, pero que siempre que se va de viaje lleva un libro de Borges con el objetivo de ‘afinar el instrumento’. Borges es el estilo”.

Pablo Neruda
“Era un poeta genial, un gordito pícaro de buena vida, y stalinista -tiene más de 25 poemas sobre Stalin-. Un hombre sensual al que le gustaba la buena comida, la buena cocina. Estuve con él en la casa de Margarita Aguirre cuando estaba casado con Matilde Urrutia, y otras veces también. Puedo decir poemas enteros de Neruda”.

Niní Marshall
“Una gran actriz que escribía libretos muy divertidos. Yo la acompañé tres o cuatro años lindos de su vida, a fines de los ‘50. Era seria trabajando, pero a la vez muy amorosa. Una mujer espléndida”.

Aníbal Troilo
“Pichuco era Pichuco. Tocaba el fueye, dirigía, hablaba con los amigos, tomaba whisky”

El manco de Teodelina
Es una figura que el pueblo argentino debiera conocer más. Fue un jugador de pelota  a paleta, fallecido en 2005. Es el símbolo del deportista elemental argentino. Seguramente no sabía nada de oxígenos ni de drogas, lo único que le gustaba era la cerveza y decir versos criollos, y al otro día en la cancha de paleta no le ganaba nadie. Chiquito, simpático, extraordinario. Creo que es el símbolo del deportista autóctono, genuino, sin ninguna clase de elaboración psicológica.