Chenoa: “No se puede vivir sin un dulce de leche”

La cantante y ahora presentadora argentina vive un nuevo momento de gloria al estar al frente de las galas del programa musical que busca a los mejores cantantes de España.

Desde ayer, puede verse en Prime Video la edición 2023 de Operación Triunfo, el reality más famoso del mundo de talento musical y tiene a Chenoa, salida de la primera edición, como conductora de las galas. Con ella hablamos sobre su vuelta al formato en otro rol y muchas cosas más.

—Chenoa, seguís conectada con tu lado argentino, por lo que escucho en tu acento…

—Bueno, sí. En casa seguimos hablando argentino, pero tengo ese cántico así como mezclado, viste, normal de bueno, que no hablo del todo, pero sí, acá llegó un poquito. Pero no se me olvida porque en casa seguimos teniendo ese folklore nuestro de asado, de quincho, de mate cocido, o sea, se mantiene la Argentina, no se puede vivir sin un dulce de leche y esas cosas.

—¿Cómo estás viviendo este gran día y volver 22 años después al programa, pero como presentadora de este formato que también te hizo conocida en todo el mundo?

—Ay, Dios mío, ¿cómo vengo? Yo creo que con toda la ilusión, con muchos recuerdos también. 22 años después y estoy presentando algo donde yo concursé, entonces se cierra un círculo estupendo a nivel universal energético para mí, una gran responsabilidad. Pero lo tengo como muy a fuego de dar todo el amor del mundo a los chicos que van a participar, que son los reales protagonistas de OT 2023 en Prime. Creo que es importante darles esa empatía que yo siento, entonces se va a generar una relación natural.

—¿Imaginaste estar al frente del programa alguna vez?

—No. Yo creo que ni me visualicé, nunca, ni lo soñé, viste, no tuve nunca esa sensación de repente de imaginar si un día presento yo. No, ni loca, o sea, más que nada, porque no veía el momento, también es verdad que estaba con muchos proyectos y de repente todo encajó perfecto y cuando recibí la noticia, si te soy honesta, estuve bastante shockeada. O sea, dije que sí de primera y luego estuve muy en shock intentando gestionar el procesar, digerir por qué la gente me preguntaba como algo natural, me preguntaba si estaba recontenta. Yo no sabía qué decir, viste, estaba como no sé qué decirte todavía, estoy entre el pánico y el respeto y manejo mil sensaciones. Y la verdad es que estoy ahora muy emocionada porque tuvimos una rueda de prensa muy linda, donde pude, de alguna manera, romper el hielo de una vez, me vi y disfruté eso. Estoy buscando el equilibrio aún.

—Vos estuviste del otro lado, ahora vas a estar al frente y seguramente también tenés el recuerdo de quién conducía. Desde este lugar, ¿cuál es el principal desafío de Chenoa hoy en día plantada frente al set como conductora, pero también con todos esos recuerdos?

—Ay, me voy a dejar llevar mucho, viste, por la parte musical. Porque a mí la música me gusta, entonces si veo una canción que me toca el alma, seguro que me ponga a llorar porque yo soy así, soy sentida. Entonces al final lo vivo todo al punto intenso. Eso va a pasar. Yo no me voy a ocultar atrás de ninguna postura que sea de atrezo, no me funciona, no me gusta. Quizás es ese punto natural que si van a ver en mí como desafío, seguramente, mantener cierta Ying y Yang, tener todo más o menos equilibrado que es lo complicado de ir por la vida sin postureo como digo yo, pero bueno, creo que lo voy a lograr igual en la gala cuatro.

—¿Por qué crees que nos sigue atrapando el formato?

—Porque hemos aprendido a quererlo. Yo creo que es una manera de querer un programa que en algún momento ha significado una parte de tu vida, de qué estabas haciendo, si te estabas casando, si te estabas terminando la carrera, si te dieron trabajo, vos te acordás de las galas y es como que de repente marcaron un momento de tu vida. Entonces, a nivel humano, es normal que tengamos ese cariño por algo que en algún momento nos acompañó. OT logra de alguna forma ser tu compañero en un periodo de vida donde te pasan cosas y esta es la idea. Yo creo que de Prime, sobre todo de hacerlo así, porque lo puedes poner en el momento que vos creas o cuando lo necesites y sabes que vas a ver algo que le tienes cariño. Yo creo que esa es la clave de todo esto.

—¿Siempre supiste que el arte era lo tuyo?

—Bueno, tampoco lo tuve tan claro. Mi papá es bajista, mi mamá es cantante, entonces una vez que tuve que ir yo a trabajar, en realidad para mí fue algo como muy normal, agarrar la carpeta de las letras, irme al hotel a cantar. Tenía 16 años, era muy chiquita, pero fui porque era el sustento de la familia y se iba a trabajar sin ningún problema. La confianza de la parte paterna y materna es la importante y la tuve y a partir de ahí ya creé mi banda. Ya me puse a cantar en bandas de jazz, de soul, empecé con algo diferente para mi edad, quizás, un estilo más minoritario de público, pero que me funcionó bien y hasta que entre en OT fueron 10 años de ir a mucho muchos lugares, a tocar, es verdad que vivía solo desde muy jovencita y mi sustento era la música. Entonces me busqué la vida.

—¿Qué artistas argentinos te gustaría escuchar en OT?

—Yo soy muy retro, perdónenme, discúlpeme, pero yo me voy a un Fito Páez. Me lo pongo mucho cuando necesito escuchar algo que me suba la vida, que es El amor después del amor, que son canciones de toda la vida, son himnos para mí y cierto que crecí con Serú Girán, con Soda Stereo, pero Fito fue algo que sentí más.

Noticias Relacionadas