Jeffrey Waldron: “Mi fuerza no está en narrar a través de los actores”
El director de fotografía de la nueva versión de Mansión embrujada habló con diario Hoy sobre su profesión y los desafíos de la película.
La entrega titulada Mansión embrujada es la nueva superproducción de los estudios Disney que tiene a Jeffrey Waldron como responsable de la fotografía. Es por ello que este multimedio dialogó con él para conocer los detalles de su trabajo en esta y otras producciones. Además, habló sobre los proyectos que se trae entre manos, las propuestas venideras y mucho más.
—Antes de hablar de tu trabajo en la película, ¿cuándo sabías que querías ser parte del mundo del entretenimiento y director de fotografía? ¿Bajo que circunstancias se dio tu entrada a este universo tan divertido y apasionado?
—Yo era muy joven, tal vez cuando yo tenia siete u ocho decidí que quería ser un animador, inspirado por muchos de los grandes viejos filmes de Disney. Y luego, en el crecimiento, empecé a hacer más películas de acción en vivo, muchos efectos especiales en cámara, algo de ilusión óptica, cosas mágicas con mi hermana de diez años de edad.
—¿Cómo se dio la interiorización en el oficio?
—Luego empecé a estar más interesado en historias humanas y me di cuenta de que quería ser director de fotografía. Así que realmente sabía, por el tiempo en que estaba, en mi adolescencia, que esto es lo que quería hacer. Así que sí, empecé a perseguirlo muy rápido.
—Tal vez conozcas a un director de fotografía portugués llamado Rui Poças. Él me decía que es un buen modo de ser un narrador, porque si una película era mala, la culpa era del director, no del DF, ¿creés lo mismo?
—Sí, creo que mi fuerza no está en narrar a través de los actores, así que mi rol trabajando con el director es solo preocuparme por lo visual, es algo que realmente amo. Creo que el director tiene mucho más que hacer; y asegurar que la historia, en términos de lo que es la emoción de la escena, suceda. Todas las cosas son tan visuales que puedo cerrar mucho de la pintura más grande. Y, claro, al final del día, está en la espalda de los directores asegurar que las actuaciones sean buenas y que los sonidos de la descripción hagan sentido.
—¿Qué responsabilidades tiene este rol? ¿Cuáles considerás que son fundamentales?
—El director es responsable de todo. Pero me gusta más la fotografía porque creo que mi cerebro está más en sintonía con el foco de la composición y color; son las cosas con las que me gusta jugar, en vez de con los actores y todo eso.
—Has hecho fotografía en shows y películas. Me gustaría saber, ¿el trabajo es el mismo? ¿Hay alguna diferencia? ¿Qué cambios notaste con el paso del tiempo? ¿Los hubo o considerás que no hay dinamismo?
—Sí, generalmente... Primero, he hecho muchos filmes independientes, filmes de bajo presupuesto, que se mueven muy rápido. Eso fue un entrenamiento muy bueno para la televisión, porque la televisión es muy rápida, multicámara. Hay un poco más de énfasis en tu composición y en todo; porque la televisión visualmente, en términos de producción, es más sobre la eficiencia. Hay una gran cantidad de cosas de streaming, y yo me acerqué en un mundo donde la gente empezó a cuidar de la fotografía y se siente muy diferente de la TV. Hay mucho menos diálogo. Hay muchas veces en las que estás realmente creando una secuencia entera de una sola cámara o un solo movimiento; mientras en la TV, porque es tan diálogo, estás tratando de hacer la luz hermosa o estás tratando de contar la historia en la forma que el guion requiere, pero tenes que hacerlo muy eficientemente con dos o tres cámaras. Siempre intento encontrar en mis colaboraciones en televisión algo de esto.
—¿Cuál fue tu inspiración para la fotografía de Mansión embrujada? ¿Viste las versiones anteriores del filme o te inspiraste en esta atracción de los parques?
—Una gran parte de la inspiración fue el juego, porque quise volver a sus raíces y tratar de descubrir que la hizo tan buena. Es una carrera muy única, porque fue realizada en 1969 y no ha cambiado en más de 50 años. Usa trucos de magia visual con un tono muy extraño. Es asombrosa, pero también te hace sonreír; aunque no diría que es graciosa. Tiene una sensación simple y agradable, un entretenimiento de tres minutos en vivo. Y pensé: “¿Cómo doy a la gente esa sensación?”.
—¿Qué hicieron al poner manos a la obra?
—Creamos un set a partir de exactamente todos estos diseños originales de la década de los 60, y luego los construyeron en lo que se sintió como una casa muy real. Así que para mí fue como tomar los elementos crecientes, como los elementos típicos: los candelabros, la luna, los cristales, y todo eso, y hacer que se sienta real y grande. El director también es una cineasta y trajo muchos filmes antiguos que estudiamos juntos y miramos. No vimos el original de Eddie Murphy, pero sabíamos que había un script muy diferente, un tiempo muy diferente y un tono diferente de lo que estábamos buscando. He visto la de los Muppets y me encanta la versión, es divertida.
—A todos nos encantan los Muppets.
—Sí.
—¿Cómo te sentís con el estreno? ¿Qué sensaciones te rodearon al respecto?
—Es un momento muy interesante para lanzar una película. Hay una gran batalla aquí en los Estados Unidos; no es la celebración que me gustaría, pero creo que estas son conversaciones importantes que necesitan tener. Todos trabajamos tan duro, sería increíble celebrarlo juntos.
—¿Cómo sos con el trabajo en este paradigma?
—Yo trabajo en una película y le doy todo lo que pueda, intento hacerla visualmente tan interesante como puedo; pero este es el punto en el que tengo que finalizarla y solo esperamos que todos encuentren la alegría que hemos tenido al hacerla. Hasta ahora hemos tenido una gran cantidad de feedback sobre los que realmente tuvieron tiempo divertido.