Entrevista Exclusiva
Nancy Dupláa: “Seguramente algunos se van a sentir incómodos y movilizados”
En su vuelta a las pantallas, tras su participación en la exitosa 100 días para enamorarse, Los internacionales y la película El retiro, encarna a una fiscal que desmenuzará el detrás de escena de un credo y sus vínculos con el poder y la política.
La producción de K&S y Netflix, El reino, es una de las más vistas de la plataforma, narrando con dosis exactas el thriller más tradicional con condimentos de política, religión y corrupción para reflexionar sobre el avance de la derecha en la vida de la región. Protagonizada por Diego Peretti, Mercedes Morán, Chino Darín, Peter Lanzani, Joaquín Furriel, Vera Spinetta y Nancy Dupláa, entre otros, tiene tras los libros y la dirección a Claudia Piñeiro y Marcelo Piñeyro. Para conocer más detalles de la propuesta diario Hoy dialogó en exclusiva con Dupláa, que encarna a Roberta, la fiscal que llevará adelante la investigación sobre el asesinato que dispara la trama.
—¿Qué te aporta como actriz volver a este género en el que ya tuviste experiencias?
—Como actores, meterse en un mundo que no es el propio es uno de los grandes desafíos. Interpretar una personalidad diferente que se mueve en un universo diferente también es un desafío importante, fuerte y diferente que como actriz te da ganas de abordarlo. Este es un universo que si bien lo conocía tiene sus matices y diferenciaciones, soy una fiscal, me muevo en el ambiente judicial con todo lo que eso implica para una mina, en una fiscalía chica, un caso muy grande, son universos que te hacen investigar de más y crecer, seguir aportándote como actriz.
—¿Cómo fue retomar a Roberta tras el paréntesis impuesto por la pandemia?
—Teníamos la certeza de que íbamos a volver a trabajar, porque tanto K&S como Netflix nos acompañaron en ese tiempo que iba transcurriendo, que primero iban a ser 15 días, después un mes, dos meses y se fue extendiendo hacia un punto lejano pero sabiendo que el norte era volver a arrancar en algún momento, que esto se iba a reformular e íbamos a poder arrancar de nuevo, y así fue. Igualmente, de alguna manera, nunca dejamos de estar ligados a la serie y el personaje, es más, a algunos nos vino bien, yo adelgacé además, que es muy importante a la hora de componer un personaje (risas). Ese tiempo lo capitalicé muy bien, volviendo a leer los guiones, la información entraba de otra manera y en la vuelta hubo una reformulación en la metodología del trabajo que fue impactante pero a la que nos adaptamos inmediatamente.
—¿Qué fue lo más difícil de encarnarla?
—La exploración nueva de nuestro colectivo de lucha, sobre todo en la política, en el poder judicial, y en tantos otros que seguramente no conocemos. El desbalanceo siempre estuvo históricamente, ahora nos estamos haciendo camino al andar con las transformaciones. Mostrarla lúdicamente en una serie me parecía que era un aporte interesante, viendo cómo una mujer se puede hacer espacio en un ámbito tan hostil, con peces gordos arriba de uno que toman las decisiones, que aprietan, mostrar eso me parecía un plus.
—La fe, con la doble moral, que se va introduciendo en espectáculos masivos de entretenimiento, necesita un proyecto que permita desentrañar con mirada crítica aspectos de la sociedad. Cuando leíste el guión, ¿cómo fuiste viendo esto?
—En mi caso tenía un atractivo diferente, nunca había leído o llegado a mis manos una historia que refleje cómo son estos movimientos religiosos por dentro y lo que generan en la conciencia colectiva de los que lo siguen, y eso ligado al mundo de la política. Desde la ficción, ver los vaivenes, los negociados, los circuitos de poder para lograr más poder, olvidándose del verdadero origen de la política, que es tratar de darle los beneficios a su gente, de ver de qué manera se generar los derechos para la gente, bueno, todo lo contrario, desde ahí me pareció atractivo. Pero bueno, es una situación lúdica, es una serie, llega a las casas de la gente, seguramente algunos se van a sentir incómodos y movilizados, porque se habla de política y religión, dos tópicos muy personales, para cada uno de nosotros. No tengo en claro qué es lo que va a generar, creo que sí va a hacer algún movimiento, y ese es uno de los motivos por los que uno elige lo que hace, que aparte del hecho artístico, genere algún movimiento en las conciencias, en los pensamientos.
—¿Hay alguna escena que te haya gustado interpretar particularmente?
—La presentación de la fiscal a la familia, que está en el primer episodio, esa presentación me gustó, como esta irreverencia del personaje, sin miedo, sin pruritos, se mete así, un poco invasiva, donde se presenta y va a ver con qué se encontraba. Después otra del episodio siete, con Nico García Hume, que cuando la leí, lo llamé y me dijo que estaba por hacer lo mismo, y Marcelo y Claudia cuando la hicimos nos dijeron muchas cosas.
—¿Hiciste algo para el estreno? ¿Armaron un grupo de WhatsApp?
—No, es un grupo que está harto de los grupos de WhatsApp y nadie se animó a armarlo.