Un show con un despliegue de luces de primer nivel

Las swifties en Argentina volvieron a colmar el estadio monumental en lo que fue la segunda velada de la gira internacional de Taylor Swift, luego de que tenga que suspender la fecha del viernes por la fuerte tormenta que azotó la ciudad de Buenos Aires.

Esto significó que muchos fanáticos, algunos provenientes de otros países, que habían viajado para su espectáculo, se encontrasen en la difícil tarea de tener que cambiar boletos y, algunas de ellas, tuvieran que perder su trabajo. Pero nada es suficiente con tal de ver a la artista estadounidense.

Los fanáticos se agruparon bajo la lluvia para, entre todos, hacerle frente a la tormenta. Los equipos impermeables se les pegaban a la ropa y no llegaban a aislar del todo, mientras el agua se acumulaba en sus botas sin cesar. La lluvia fue demasiado fuerte, y hasta último momento permanecieron en el lugar haciendo largas filas.

Taylor Swift nunca había cancelado ni reprogramado un espectáculo en su exitosa gira Eras. De hecho son más que conocido sus presentaciones bajo el agua, pero en esta ocasión las seguidoras estuvieron expectantes a lo que sucedería con el recital, hasta que por fin se conoció la noticia.

Las aerolíneas se hicieron eco del problema que surgió con la cancelación del recital. Muchas fans ya tenían vuelos programados, por ende tenían que enfrentarse al dilema de volverse sin ver a su estrella o desembolsar más dinero para poder verla. Las empresas aéreas aceptaron hacer cambios de viajes, en algunos casos sin cargo.

La actuación de la cantante del sábado también marcó la primera vez que subió al escenario después de lograr otro gran hito en su carrera, convirtiéndose en la canción del año más nominada en la historia de los Grammy después de recibir un reconocimiento por Anti-hero el viernes.