entrevista
Verónica Llinás: “Nuestro país es una maravilla”
Tras una exitosa temporada en Calle Corrientes, la popular actriz inicia junto al elenco una gira por todo el país y países vecinos.
Antígona en el baño, de Facundo Zilberberg y Verónica Llinás, comenzó su gira nacional e internacional tras su exitosa temporada en la Calle Corrientes. Protagonizada por Héctor Díaz, Darío Lopilato (que reemplaza a Esteban Lamothe) y Llinás, cuenta las horas previas al debut de una gran diva del teatro que de repente no quiere salir a escena y se encierra en el baño. Para conocer detalles de la gira y la incorporación de Lopilato hablamos con Llinás en exclusiva.
—¿Cómo es esto de sumar a Darío tras una gran temporada con Esteban?
—Es trabajo porque hay muchas cosas que se tienen que adaptar, porque son dos physique du role totalmente diferentes. Tal vez Darío es más parecido a lo que era el personaje originariamente en la obra y después cuando el actor fue Esteban, se modificaron cosas porque aportaba un montón de otras situaciones, pero hubo que modificar un poco el personaje y se inventaron otras cosas y se le sacó jugo a eso que Esteban tenía para proponer. Bueno, ahora con Darío, se vuelve un poco a este ese personaje original, por supuesto sumando todo lo que él tiene para proponer, que es un montón porque es un comediante espectacular. Entonces, es muy lindo ese trabajo, porque es ver cómo la obra se va modificando, cómo nos vamos adaptando, algunas cosas cambian, se inventan chistes nuevos, hay una relación corporal entre él y yo totalmente diferente a la que tenía con Esteban, y eso también propone algo gracioso, esa diferencia, es como una inyección de adrenalina.
—Ustedes ya la vienen haciendo, que se incorpore alguien nuevo, ¿suma?
—Sí, estamos todos al servicio de que él se vaya familiarizando con la obra. La vaya haciendo propia, pero no es una cuestión que él va a tener que venir a ponerse un traje de otro. Él va a inventar su propio personaje. Es también una linda forma de trabajar lo nuestro, porque es ahora trabajar lo nuestro con relación a él, a ese nuevo personaje. A mí me encanta trabajar, sobre todo cuando en una obra no es el final, es excelente el arranque de otro tipo de trabajo que se hace con el público, que a mí me apasiona casi más que cualquier otra cosa.
—Además, en esta obra en particular ese diálogo con el público la hace crecer y la cambia mucho…
—Cambia mucho porque el ritmo que uno al principio tiene es todo medio, un poco más con alfileres. Después te vas apropiando más de la obra, cada actor se va fortaleciendo más y después el recorrido tiene que ver mucho con lo que devuelve el público que te va indicando por dónde, qué se entiende, qué no se entiende, qué hace gracia, qué no hace gracia y eso es hermoso como trabajo.
—Ahora salen de gira, a recorrer el país, ¿es algo que te gusta? ¿Lo venís haciendo siempre?
—Me costó mucho porque soy una persona muy de sus hábitos en casa, de los perros, soy muy de respetarme. Yo vivo en un lugar muy salvaje, entonces de pronto me metí en un hotel y enfrente tengo un edificio y me costó mucho. Con Dos locas fue una gira muy exigente, entonces para esta gira un poco yo puse los lugares porque la producción quería llevarme por todos lados y dije: no, paremos, hacemos estos días. Les puse un poco de coto ya sabiendo lo que para mí significaba la gira, haciéndola más cerca, de pronto, y determinados lugares, determinadas condiciones, y después también sabiendo a cada lugar. Ya sé a dónde voy, ya sé lo que puede pasar, ya sé todo, pero también sé todo lo bueno que pasó, porque si bien hubo cosas que me costó asimilar, hubo cosas maravillosas, nuestro país es una maravilla. La gente es una maravilla, el amor que se vive en las giras es increíble, es gente que te invita con cosas, te regalan cosas, se queda al final y te abraza, te agradece que de un modo muy particular y eso la verdad que es muy revitalizante.
—Y cuando estabas en ese momento de gira, pensaste, ¿pero por qué no lo hice antes?
—No, yo entiendo por qué no lo hice, o sea, yo sé. Por esto que te digo, porque también me gusta mucho mi casa, porque además antes tenía un marido y entonces bueno el tiempo ahí con tu pareja, si estás de gira se reduce mucho, entonces, bueno, hay momentos para las cosas y a mí me llegó hoy, en este momento.
—¿Tiene más significado en este caso la gira, ya que vos escribiste e imaginaste el proyecto?
—Es doblemente gratificante porque es mi proyecto, tengo demasiada implicación en cada una de las cosas, entonces este es muy satisfactorio eso para mí, porque también fue una apuesta grande. Fue un riesgo muy grande, corrí mucho riesgo en hacer todo esto porque si era un fracaso, yo fracasaba en muchos ámbitos. Entonces, me da mucho alivio que haya funcionado, que funcione la gira y nos pidan de todas las provincias, me da mucho orgullo, mucha satisfacción.
—Es un momento complicado en todos los sentidos y de la ficción, pero, más allá de la obra, ¿estás imaginando algún otro proyecto, algo de cine?
—Yo quiero hacer otra película, a ver si la puedo hacer, ojalá la pueda hacer porque es algo pendiente. Pero no es el momento porque ahora es realmente de dedicarlo a Antígona, y yo quiero hacer lo más posible por esta obra, vamos a ir también al exterior, Uruguay, Paraguay y estamos tratando de ir a Perú. El problema es que tiene una escenografía importante, entonces hay que ver los costos, porque a todos esos países les interesa, pero tienen que ver cómo lo hago, cómo adaptarlo, no hay mucha posibilidad de adaptación porque es un baño. Pero la intención es esa, llevarla también a otros países latinoamericanos, una vez que esto se apriete un poco vamos a ver, porque el problema es que es muy, muy agotador. Entonces, después, cuando vos estás girando, no estás, y no te da para estar gestionando, debería ser así y mi objetivo es que pudiera ser así. Ahora que ya conozco, cómo es ir gestionando otra cosa. Además, voy a hacer un corto para Prada, con Laura Citarella. Fue muy exitosa la experiencia de Trenque Lauquen, entonces a partir de ahí ella fue la codirectora conmigo de La mujer de los perros, vamos a hacer este corto. Ahí interrumpo la gira porque la verdad es que no me lo podía perder, pero después la intención es darle a Antígona en el baño todo lo que tenga para dar y seguir exprimiéndola porque de verdad creo que la obra va mejorando, se va haciendo cada vez mejor. Creo que va a ir potenciando su público.