Actividad física y calor: cuáles son las claves para no sufrir en verano
Con la llegada de las altas temperaturas, surge la necesidad de tomar medidas para no interrumpir el ejercicio y, a la vez, evitar consecuencias negativas en la salud.
La actividad física es parte de la rutina diaria de los platenses y, para la gran mayoría, las altas temperaturas no parecen ser un impedimento para salir a ejercitarse. Más allá de las intenciones de entrenar, es necesario tomar en consideración algunas cuestiones para no dañar la salud.
A la hora de realizar ejercicios al aire libre, es importante hacerlo a primera hora de la mañana o sobre el final de la tarde, para aprovechar así los momentos más frescos del día.
Asimismo, no hay que olvidarse de mantener la hidratación antes, durante y después de la actividad.
Cabe destacar que el entrenamiento, junto con el calor del ambiente, provocan un aumento en la temperatura del cuerpo. Para enfriarse, el organismo disminuye la cantidad de sangre en los músculos y envía esta a circular a través de la piel. Si bien los niveles de transpiración y los vasos sanguíneos se ajustan al calor, los sistemas de enfriamiento natural pueden fallar al estar expuestos a altos niveles de humedad.
Por eso mismo, es aconsejable evitar la exposición directa al sol y usar ropa clara y liviana que permita una transpiración adecuada.
Además, se recomienda prestar atención a la aparición de síntomas para detener la actividad cuanto antes y proceder a bajar la temperatura corporal. Estos pueden ser: mareo, dolor de cabeza, fatiga, sensación de ahogo, frecuencias cardíacas elevadas y calambres.
Como norma general, durante los meses de verano es importante beber una mayor cantidad de agua de la que se ingiere con normalidad.
Si el entrenamiento requiere exposición solar, es aconsejable utilizar protector solar, ya que ayuda a prevenir enfermedades de la piel y disminuye el riesgo de generar cáncer de piel.
Pese a que estas medidas están enfocadas a aquellas personas que desean mantener su rutina de ejercicios durante el verano, cabe destacar algunas reglas generales a tener en cuenta para evitar complicaciones.
Al ser consultado por diario Hoy, el cardiólogo, deportólogo e integrante del Comité de Cardiología del Ejercicio de la Federación Argentina de Cardiología (FAC), Juan Pablo Ricart, explicó: “Es fundamental que todos aquellos que realicen una actividad consulten antes a su médico de cabecera”.
“Quienes practican ejercicios moderados o intensos, como bicicleta, entrenamiento funcional, CrossFit, pádel, fútbol o vóley, deben someterse a una evaluación cardiológica”, añadió el especialista.
Por último, Ricart recomendó: “Es necesario que hablen con los médicos de cabecera sobre el deporte que van a realizar. El profesional debería indicar qué estudios hacer, porque, si bien está presente el riesgo de muerte súbita y el peligro de algún evento cardiovascular, hay otras contingencias que pueden no resultar fatales, pero sí incapacitantes”.