Animarse a vender y comprar en línea

Debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio, emprendedores y consumidores se volcaron a los negocios online.
Una dupla de amigas de la ciudad, integrada por las diseñadoras en Comunicación Visual, Jesica Vannieuwenhoven y Lucía Medina, creó la marca Bisnû. La misma ofrece pañoletas, pañuelos y otros objetos de moda a través de una tienda en línea.

“Hace dos años empezábamos a utilizar una plataforma de comercio electrónico llamada Tiendanube. Sin embargo, los pagos y las entregas se coordinaban por fuera del sitio. No lo hicimos tanto para vender, sino para aumentar nuestra presencia en las redes”, contó Jésica.

El presente impuesto por la pandemia obligó a la sociedad creativa a actualizarse. Tras indagar sobre las formas de envío y los porcentajes de dinero que se retienen en las transacciones, Jésica reconoció: “La situación nos forzó a ponernos en tema. Teníamos más inseguridades nosotras, que nuestros clientes. Hoy estamos recibiendo pagos electrónicos y haciendo envíos a todo el país”.

Según datos de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), la venta online, en el 2019, tuvo una facturación estimada en 403 mil millones de pesos. El año pasado se generaron 90 millones de órdenes de compra, por intermedio de las diversas plataformas de venta electrónica. Los expertos auguran un aumento en las cifras, tras la imposibilidad de establecer un contacto directo entre los compradores y vendedores.

La mayoría de los consumidores admite que en internet localiza precios competitivos y descuentos. En este sentido, Gabriela Sighel mencionó que compró el regalo de cumpleaños para su hija, y dijo: “Fue muy práctico, aunque tuve miedo de que no llegara, porque en la primera visita los del correo no encontraron mi domicilio”.
La experiencia para Macarena Sánchez Ortiz no fue positiva. “Compré un mueble en un híper de la construcción. Pregunté cuánto medía, y cuando lo recibí tenía diez centímetros menos que lo que me habían informado”, denunció la joven.

Sin embargo, tanto consumidores como vendedores afirman que, ante la amenaza del coronavirus, internet es un excelente sitio para las compras.