Científicos argentinos crean nuevo tratamiento contra el coronavirus
Un equipo de investigación argentino comenzará los ensayos clínicos para evaluar un spray nasal que impediría que el virus ingrese al organismo a través de la nariz, una de las vías de infección.
En días donde los científicos de todo el mundo trabajan a contrarreloj para poder brindar soluciones concretas contra la pandemia que afecta al mundo, la ciencia argentina no deja de sorprender en cuanto a iniciativas y trabajos específicos que están al servicio de la sociedad.
En este caso, un nuevo tratamiento preventivo que iniciará los ensayos clínicos para evaluar un spray nasal cuya función sería impedir el ingreso del virus a través de la nariz, una de las principales vías de contagio.
“La idea del proyecto surgió estudiando el problema de la olfacción, de la pérdida del olfato, estudiando el ingreso del virus a través del epitelio olfatorio y su posible afección al sistema nervioso de una manera mucho más directa de la que se pensaba”, le contó a diario Hoy Osvaldo Uchitel, investigador del Conicet y director científico del proyecto financiado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
“Y frente a eso comencé a buscar algún tipo de barrera que pudiese disminuir el ingreso a través del epitelio olfativo”, agregó.
El spray nasal, aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) y que brindaría protección contra la Covid-19, es un medicamento cuyo principio activo es la carragenina, una molécula obtenida de ciertas algas rojas, que se utiliza en la industria alimentaria, farmacéutica y cosmética. Interactúa con las cargas positivas de la superficie de las partículas virales y así previene el ingreso del virus.
El investigador trabaja en conjunto, hace tiempo, con el doctor Juan Manuel Figueroa, que es jefe del servicio de Neumonología Pediátrica en el Hospital de Clínicas (hospital-escuela dependiente de la UBA) y director clínico de la iniciativa.
Figueroa utiliza los spray con carragenina para tratar gripes, resfríos y evitar contagios excesivos durante la época de las afecciones respiratorias. “De alguna manera llegamos a ponernos en contacto, y él ya estaba gestionando algunos de estos procedimientos, y en este momento estamos trabajando juntos para poder implementarlo”, sostuvo Uchitel.
Consultado sobre los procesos de los ensayos clínicos, expresó: “Básicamente si se trata de enfermos, se los trataría dentro de las primeras 48 horas, por lo menos esa es la idea, y se lo seguiría durante 20 días en los cuales el enfermo tendría que aplicarse spray nasal, con lo que nosotros suponemos que se va a disminuir la carga viral y por lo tanto la peligrosidad de la enfermedad”.
Además, el investigador agregó que “de acuerdo a la visión que tengo sobre el ingreso del virus al sistema nervioso, podría evitar las crisis respiratorias severas que aparentemente en muchos casos tienen un origen más del sistema nervioso central como tal y no tanto de una afección pulmonar”.
Las expectativas y uno de los objetivos del trabajo apuntan a reducir los contagios en “el personal que está en contacto con enfermos de Covid-19. Que tengan menos tasas de infección, porque evitaría el ingreso del virus y por lo tanto disminuiría la carga viral”.
Para concluir, manifestó: “Creemos también que sería útil utilizarlo para personas que están en contacto, para focos de infección, por ejemplo en centros de aislamiento, para todo el personal y toda la gente que sin estar enfermos de coronavirus podría uno protegerla”.
El equipo que trabajó por momentos de manera virtual está integrado, entre otros, por la doctora Mónica Lombardo y la bióloga molecular Itatí Ibáñez, del Instituto de Ciencia y Tecnología César Milstein.