¿Cuál es la cirugía estética más solicitada por los hombres argentinos?

Los especialistas aseguran que el implante de pelo es la intervención corporal más recurrente en los argentinos de sexo masculino. Un reconocido médico especialista en micro trasplante capilar, explica los motivos y los métodos 

El implante capilar  es la cirugía estética (o reparadora) más frecuente en los hombres en Argentina. Los más recurrentes a estas intervenciones tienen entre 35 y 55 años y buscan recuperar juventud y buena apariencia, pero con naturalidad. El Dr. Luis Palmarino, médico cirujano especialista en cirugía plástica y micro trasplante capilar, lleva más de una década realizando estos procedimientos, tiene su clínica en Buenos Aires y habló en exclusiva con el diario Hoy. “Lo más avanzado en estas intervenciones es el micro implante capilar o micro trasplante folicular suave. Son las cirugías más demandadas por los hombres ”, expresó el especialista. 

Para esta cirugía hay dos técnicas. “La FUSS, que es la más usada mundialmente y permite transplantar hasta 4500 unidades foliculares en 6 horas,  consiste en extraer una tira de piel del cuero cabelludo de la nuca, y el trasplante de esas unidades en el área receptora (alopécica), donde previamente se realizaron micro perforaciones de 1 a 5 milímetros con agujas especiales”. Otra técnica llamada FUE, utiliza un elemento denominado implanter, con el que se extraen directamente las unidades foliculares de la nuca.  “La desventaja es que previamente hay que rapar al paciente, y otras es que hay mayor cantidad de foliculos dañados, ya que no se ve la raíz del folículo;  la ventaja es que no deja cicatriz”.

¿En qué consiste el implante?

Una cirugía de micro implante capilar es ambulatoria, con anestesia local y lleva un promedio de 5 a 6 horas, de acuerdo con la cantidad de unidades foliculares que requiera el paciente. En los casos de calvicie más avanzada se hace más de una cirugía, con 6 meses de intervalo.

El paciente operado puede retomar sus actividades a las 48 horas una vez hecha la cirugía y los resultados se ven en forma gradual. A los 6 meses  se ve el 70% del resultado final y al año el resultado definitivo. Al ser el cambio gradual, otorga naturalidad a la evolución.

El impacto psicológico

Los que se realizan estas intervenciones  tienen mayor adeptos, aquellos de 35 a 55 años. La falta de cabello afecta su autoestima. “El hombre lo hace por él mismo y también por los demás. El que está acomplejado por la falta de pelo piensa que cuando lo miran, eso es lo único de él que notan los demás, dejando de lado las virtudes que pudiese tener, esto se acentúa con el paso del tiempo.  Puede instalarse un complejo de inferioridad que repercute en todos los niveles, por supuesto también en la intimidad; tener pelo o en todo caso recuperarlo significa para muchos un cambio clave en sus vidas, que asocian con éxito laboral, sexual y social”.