El consumo de alcohol es la principal causa de muertes en siniestros viales
El 78% de las víctimas fatalas fueron hombres y el 42% tenían entre 15 y 34 años.
El consumo de alcohol en conductores, el exceso de velocidad y la falta de utilización de cinturón de seguridad y de casco en motociclistas son las principales causas de víctimas fatales en siniestros viales, los cuales, y pese a la ausencia de cifras actualizadas sobre cada una de ellas, en el primer semestre del año se cobraron la vida de 1.675 personas.
Las restricciones a la circulación impuestas por la pandemia de coronavirus hicieron bajar de modo drástico los siniestros viales y, por ende, el de víctimas fatales como consecuencia de los mismos. Sin embargo, ya con un nivel de movilidad similar al de 2019, la cifra de muertos en este tipo de accidentes fue la más baja en los últimos trece años.
Durante el primer semestre de este año, 1.675 personas perdieron la vida en siniestros viales, un 38 por ciento menos que en 2008, año desde el cual esta cifra tuvo un incremento constante, hasta el 2020 donde la poca circulación vehicular ubicó en 1.506.
La provincia con mayor cantidad de siniestros viales en los que se registró, al menos, una víctima fatal fue Buenos Aires, con 358; seguida por Córdoba (160) y Santa Fe (144). Del otro lado, los últimos lugares en esta tabla lo ocupan Formosa (17), Santa Cruz (13) y Tierra del Fuego (3).
La mitad de todos los siniestros viales con un resultado fatal que se registraron en el país, ocurrieron en rutas nacionales y provinciales, en tanto, un 23 por ciento del total ocurrieron en calles, un 19 en avenidas, un 4 en autopistas y en otros caminos un 3, dejando un porcentaje de un 1 por ciento del que se desconoce la ubicación.
Asimismo, según datos aportados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) el 78 por ciento de las víctimas fatales de este año fueron hombres y un 21 por ciento mujeres. En lo que refiere al rango etario, el 42 por ciento de los muertos tienen entre 15 y 34 años.
Un estudio sociocultural realizado por el Observatorio Nacional de Seguridad Vial (ONSV) en el dio cuenta que, si bien el 93 por ciento de los conductores de autos y motos declara que sabe que beber y conducir aumenta el riesgo de sufrir un siniestro vial, alrededor del 20 por ciento de los conductores asumió haber conducido bajo los efectos del alcohol.
Según el informe, las personas manejan a pesar de haber consumido alcohol por falta de apego a las leyes; falta de percepción de controles policiales orientados a la vigilancia de las normas de tránsito; falta de hábitos de prevención; y por la internalización de creencias del estilo de "si manejo alcoholizado, pero con cuidado, no es peligroso".
En este sentido, el Hospital Fernández, de la Ciudad de Buenos Aires, en los últimos años se atendieron anualmente unos 2.000 intoxicados por alguna sustancia ilegal o legal, de los cuales entre el 50 y el 53 por ciento son por alcohol, la mayoría de los cuales ingresaron jueves, viernes o sábados entre las 22 y las 6 de la mañana.
En cuanto a los siniestros viales, 1 de cada 4 personas que ingresan a la guardia del hospital por algún "accidente de tránsito" consumió alcohol durante al menos 6 horas previas al ingreso, según precisó la ANSV en un comunicado y agregó que las lesiones son principalmente en las zonas más vulnerables para la salud: cabeza, tórax y cráneo.