Colapso sanitario
En el hospital San Martín evalúan la aplicación del protocolo “última cama”
Dado el nivel de ocupación de unidades de internación, habilitaron otras áreas del nosocomio local para atender pacientes.
Mientras el “tsunami” de casos de coronavirus golpea cada vez más fuerte en la ciudad de La Plata y la región, desde el policlínico San Martín ya comenzaron a evaluar la posibilidad de poner en funciones el protocolo “última cama”, en caso de llegar a un momento de colapso.
En diálogo con diario Hoy, el doctor y especialista en Terapia Intensiva del nosocomio, Sahar Benzecry, aseguró que “todavía no entró en vigor, es más nombre que otra cosa”, para llevar calma a la población.
Por estas horas, el policlínico no cuenta con camas disponibles e incluso el profesional relató que se están abriendo camas en lugares “atípicos” del hospital para pacientes ventilados, y así poder brindar atención a todos aquellos que lo requieran.
“Básicamente, lo que se está haciendo es evaluar muy detalladamente las posibilidades reales de serles útiles a los pacientes”, agregó el doctor Benzecry.
Según confirmó, antes de poner en marcha el protocolo, se agotarían todas las posibilidades de traslado de los pacientes a otros centros como también a otros municipios, como ya ocurre de acuerdo a las disposiciones del Ministerio de Salud bonaerense.
“Todavía no estamos cerca. Estamos evaluando su necesidad”, confirmó el profesional, quien a la vez destacó que, el cuello de botella es el personal especializado, una realidad que vienen exponiendo los médicos intensivistas desde el inicio de la pandemia.
En ese marco, el titular de la Dirección Provincial de Hospitales, Juan Riera, manifestó a diario Hoy que “muchas veces se imagina al colapso como algo único y simultáneo en toda la Provincia y no se da de esa manera”, por lo que explicó que “lo más probable es que haya saturaciones regionales”.
En ese caso, los hospitales trabajan con un instrumento como el SIES (Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias), que “funcionó muy bien en la primera ola”. A través de este método, el sistema de hospitales de Buenos Aires prevé la derivación de pacientes que necesiten cuidados intensivos a regiones del Interior, donde la ocupación de camas es mucho menor que en los centros urbanos más poblados.