Liberaron cinco guacamayos rojos en los Esteros del Iberá

Se trata de una especie que estuvo extinta por 170 años en el país. Previamente, las aves debieron pasar una etapa de entrenamiento en el Centro Aguará.

Los proyectos de reintroducción de especies que lleva adelante la Fundación Rewilding Argentina en distintos puntos del país siguen avanzando a grandes pasos. En las últimas horas, en los Esteros del Iberá se procedió a liberar a un total de cinco guacamayos rojos, una especie que estuvo extinta en el territorio nacional por 170 años. De esta manera, las cuatro hembras y el macho se sumaron a la población de guacamayos rojos que ya vive libremente en los montes de Yerbalito, en la zona norte del Iberá, Corrientes.

Previo a su liberación, las aves debieron pasar una etapa de entrenamiento en el Centro Aguará que duró prácticamente un año. Los cinco individuos nacieron en el Bioparque Temaikén a fines del 2020, lugar donde estuvieron aproximadamente 9 meses. Al haber nacido bajo cuidado humano, fue necesario enseñarles a volar grandes distancias y permanecer en la copa de los árboles para evitar depredadores y conseguir alimento. “El entrenamiento fue un desafío porque fue el primer grupo que se entrenó en un nuevo jaulón más grande que los anteriores, de 30 metros de largo y seis de alto. Hubo una evolución muy positiva por parte de los cinco guacamayos: durante los meses que duró el entrenamiento aprendieron a comer una variedad de frutos nativos, a reconocer depredadores con la ayuda de un zorro taxidermizado, así como también el silbato y las bandejas de alimentación, para poder suplementarlos en el monte, ahora que comenzaron con la etapa de liberación. Es un proceso lento, cada animal aprende a un ritmo diferente y los acompañamos durante todo el proceso”, le explicó a diario Hoy Elena Martín, encargada de Cuarentena y Centro de Entrenamiento del guacamayo rojo del Proyecto Iberá de la Fundación Rewilding Argentina.

Debido a los enormes incendios que afectaron a la provincia de Corrientes el pasado verano, la liberación de estos animales debió postergarse hasta estos últimos días. El fuego afectó casi el 60% de la superficie del Parque Nacional Iberá y el 13% del Parque Provincial. Si bien la naturaleza ya comenzó a mostrar indicios de recuperación, la liberación de los guacamayos rojos se vuelve algo fundamental dado el rol que cumplen dentro del ecosistema. Al alimentarse de frutos de gran porte, este animal, apodado regenerador de bosques, ayuda a dispersar las semillas contribuyendo a la funcionalidad total de la región.

“El objetivo del proyecto es crear una población autosustentable de guacamayos rojos, para ello necesitamos que sean capaces de reproducirse en silvestría. Ellos alcanzan la madurez sexual entre los cuatro y cinco años; ya hay varias parejas adultas que han tenido pichones en silvestría. Aunque los procesos y aprendizajes de los guacamayos para lograr que una pareja saque pichones adelante son largos, se los acompaña intensamente durante todo el proceso con el fin de tener cada vez más individuos nacidos en silvestría”, concluyó la integrante del proyecto de reintroducción.

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