Más de dos años reclamando soluciones en barrio Cementerio

Los vecinos de 137 y 74 continúan esperando que ABSA o la Comuna logren desagotar toda el agua de la esquina. “La gente se cae cuando cruza por el verdín”, explicaron.

Desde hace casi dos años, los vecinos de esta zona de La Plata vienen reclamando por el verdín que se juntó en el cruce de las dos calles, como consecuencia de un caño de agua roto que arrastra el líquido desde 29 y 76 hasta la esquina de 31 y 72, donde detenerse a mirar al horizonte mientras se espera la luz del semáforo para cruzar puede resultar un arma de doble filo.

Para cualquiera que decida cruzar la esquina distraído, con la vista puesta en la bolsa de los mandados o simplemente mirando si vienen autos en lugar de ver el piso, es una invitación a resbalarse por el estado de la superficie patinosa.

Ayer, Liliana, una vecina de barrio Cementerio, confirmó que los reclamos se iniciaron hace más de dos años por las pérdidas de agua en la misma zona, pero que en realidad se hizo más grave a partir de finales del 2021.

Calle 76

La calle 76, además, resulta ser la más afectada del barrio Cementerio por el agua acumulada que se registra en los cruces y boca calles desde 135 hasta 29 inclusive.

En 133 y 76 o en 134 y 76, hace varios años que no se ve la esquina seca, sin humedad, verdín o agua estancada, pero el problema se incrementa aun más cuando llueve y se eleva el nivel.

Algo similar ocurre a pocas cuadras, dentro del mismo barrio de La Plata, como en 135, entre 74 y 75, o calle 80, entre 136 y 137, en donde la semana pasada el agua cubría todo el ancho de la calle, de cordón a cordón.

“Hace más de dos años que venimos con este problema. Estamos hartos de reclamar y reclamar y no obtener una respuesta. Muchas personas que viven en el barrio incluso se terminaron resignando a que hay que acostumbrarse a estas cosas. Pero yo soy de las que piensan que hay que seguir insistiendo”, expresó Liliana.

Otro comerciante que vende sándwiches de miga en la calle 76, sostuvo, en contacto con la Red 92, que no son pocos los clientes que suelen llegar al negocio, ubicado entre 30 y 31 de la misma 76, con comentarios alusivos a la pérdida de agua y al verdín resbaladizo que se juntó a causa de varios meses sin limpieza en el lugar.

“Hace varios meses que tengo el negocio y ya me acostumbré a ver la esquina siempre de la misma manera”, expresó el dueño del comercio.

A todo esto, se le suma que, por la misma esquina, todavía están las viejas vías por donde antiguamente pasaba el tranvía, por lo que es doblemente peligroso circular en bicicletas o motos por esta zona de la ciudad.

“Para los que pasan en bicicleta es una trampa mortal. Yo he visto caerse a varias personas”, detalló otra de las clientas que acudía a una despensa de la esquina de 76 y 31, cuando este medio se hizo presente en la misma zona.

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