Plaza Rivadavia: una muestra de la “pequeña París”

Mario Retik, encargado del Archivo Fotográfico del Ministerio de Infraestructura de la Provincia, le puso palabras a su comprensión mística sobre uno de los sitios más importantes del nacimiento de nuestra ciudad: “Lamentablemente quitaron el portal principal, un espacio donde se concentra la luz que luego correrá por avenidas y diagonales”, relató. 

Circundado por el Boulevard Jerusalem (así es el nombre y lo corrobora la placa que está muy cerca del Monumento al Almirante Brown), entre la 51 y la 53, se inicia el eje 52, desde donde se proyectaría una línea imaginaria que divide la ciudad en dos mitales. Vaya curiosidad, entre 2 y 3, entre 4 y 5, entre 7 y 8, entre 11 y 12 y entre 14 y 15, se ubican los escritorios de los despachos de los representantes políticos, quienes “necesitan toda la lucidez para hacer de nuestra comunidad un mejor destino”, afirmó el reportero por oficio y vocación, que trabaja en la Casa Curuchet, lugar desde donde contempla la Rivadavia. 

Junto a la San Martín, Italia y la Iralola, ésta es una de las primeras plazas. En aquella época se la bautizó “Plaza de la Policía” en alusión al Departamento de dicha fuerza.

El espacio verde abarca de la calle 2 y la avenida 1, y de la 51 a la 53. En el sitio visitalaplata, se da cuenta que “durante las noches veraniegas la orquesta de Policía brindaba conciertos públicos, principalmente para miembros de las clases altas”. En septiembre de 1901 recibió su bautismo oficial como Plaza Rivadavia. Y en abril 1909 se erigió el monumento a Bernardino Rivadavia, siendo encargado el artista Pietro Costa. 

El 2 de noviembre de 1979 se levantó el monumento a “los funcionarios policiales de esta provincia muertos en el cumplimiento del deber”, encargado por el Ministerio de Seguridad, siendo autor de la obra el escultor Carlos Butin.

Era el principal ingreso

El “arco” es una belleza desaparecida. Se la demolió en 1915. Para el vecino platense, esta es una razón por la cual “deberíamos juntarnos y participar en una cruzada. Es fundacional. Y fue una copia arquitectónica del arco que está en la ópera de París, era igual. No olvidemos que esta ciudad está hecha por franceses y creada con la conciencia de la revolución francesa. Es más, algunos se atreven a decir que es la Pequeña Parí, y por algo a París se la denomina la Ciudad luz. Científicamente nada puede abalar lo que estoy diciendo, pero es una sensación grande que me invade”, le narró a HOY el señor Retik.