Arrasador paso de Irma por Cuba

Con vientos de 260 kilómetros por hora, el fenómeno causó graves daños en la isla. Más de un millón de personas intentan volver a sus hogares  

La virulencia del viento y la lluvia llegaron el viernes a la región de Camagüey, en el centro de Cuba, y se siguió sintiendo ayer, hasta las primeras horas de la noche, cuando el huracán Irma abandonó la isla. 

Las autoridades cubanas reportaron “daños significativos”, pero no víctimas mortales. “Es la primera vez desde 1932 que el epicentro de un huracán de categoría cinco, el mayor posible, toca tierra en Cuba”, explicaron desde el Gobierno.

Las autoridades cubanas habían evacuado en los últimos días a más de un millón de personas de las zonas más vulnerables de la isla. Además, habían declarado la situación de emergencia en 14 de las 15 provincias del país. Pero pese a las precauciones previas, el fenómeno meteorológico causó graves destrozos.

La fuerza del huracán arrasó líneas de electricidad, árboles, bancos en parques y tejados de casas, según los reportes de medios locales y de las autoridades. Amplias zonas del centro y el este de Cuba se quedaron sin electricidad. Muchas áreas costeras terminaron inundadas, los vientos llegaron a soplar a una velocidad de 260 kilómetros por hora y las olas en la costa norte ascendieron a los siete metros de altura.

José amenaza las islas del Caribe

El huracán José, de categoría 4 y con vientos máximos sostenidos de 240 km/h sigue la estela de Irma y se espera que se aproxime a las islas de Sotavento (Antillas Menores) durante esta jornada, con algunas fluctuaciones de intensidad. En paralelo, se encuentran bajo amenaza de tormenta tropical los territorios San Bartolomé y Saint Martin.

Hasta anoche, José era el huracán más fuerte del Atlántico después de que Irma perdiera algo de fuerza tras tocar tierra en Cuba y que Katia se convirtiera en depresión tropical tras alcanzar la costa de México.