Berlusconi está en una fase "delicada" por su contagio de coronavirus
El exprimer ministro italiano continúa internado en un hospital de Milán por coronavirus y evoluciona de forma regular, aunque se encuentra en una fase "delicada" a raíz de la infección pulmonar que padece, explicó hoy su médico personal.
El exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi continúa internado en un hospital de Milán por coronavirus y evoluciona de forma regular, aunque se encuentra en una fase "delicada" a raíz de la infección pulmonar que padece, explicó hoy su médico personal
Alberto Zangrillo indicó que "el paciente está tranquilo" y que la fase en la que se encuentra "es delicada", ya que la infección pulmonar que tiene "merece una terapia adecuada y lleva su propio tiempo", informó la agencia de noticias EFE.
No obstante, el profesional destacó que Berlusconi responde "de forma óptima al tratamiento" y matizó que esto no significa cantar victoria ya que pertenece a la categoría considerada de mayor fragilidad, según las informaciones locales.
El médico mostró un "optimismo cauteloso" y aclaró que hoy no habrá otras comunicaciones sobre el estado de salud del exprimer ministro.
Berlusconi dio positivo en coronavirus el pasado 2 de septiembre tras someterse a una prueba en Italia cuando regresaba a Arcore, cerca de Milán, de un viaje procedente de Francia, donde visitó a su hija mayor Marina, y este último viernes mes debió ser internado.
Zangrillo explicó el viernes que Berlusconi no presentaba síntomas cuando se le realizó la prueba que demostró que estaba infectado y que recomendó su hospitalización el 3 de septiembre por precaución, tras comprobar que tenía una dolencia pulmonar leve.
Berlusconi tiene 83 años y sufrió enfermedades cardiovasculares en el pasado.
Dos de sus hijos, Bárbara, de 36 años, y Luigi, de 31 años, así como su actual pareja, la diputada Marta Fascina, de 30, también dieron positivo en coronavirus.
Italia cuenta al día de hoy con 276.338 casos y 35.534 muertos por coronavirus desde que comenzó la emergencia en el país el 21 de febrero, y a pesar del reciente incremento de casos, el gobierno descartó un nuevo confinamiento nacional.
Al respecto, el ministro de Salud, Roberto Speranza, destacó que Italia "invirtió muchos recursos y fortaleció el Servicio Nacional de Salud".
Speranza consideró que se dan todas las condiciones necesarias para una reapertura segura de las escuelas en las próximas semanas y pidió a los partidos políticos que dejen a un lado las discrepancias y las críticas para unirse y superar juntos la crisis de la pandemia.
"El otoño no será fácil y pienso que deberemos actuar con la máxima cautela. Sin embargo, soy optimista", opinó en una entrevista que publica hoy el diario Corriere della Sera, citada por EFE.
"Hasta la vacuna tenemos que mantener el nivel de atención muy alto", agregó el responsable de la cartera de Salud.
Italia espera contar con las primeras vacunas antes de final de año.
Las primeras dosis, alrededor de dos o tres millones, irán destinadas a los trabajadores sanitarios y a las personas mayores con enfermedades, particularmente las que se encuentran en residencias.
"Cuando llegue la vacuna, el problema será decidir a quién dársela. Al principio tendremos unas dosis, dos o tres millones. Mi propuesta es que sean gratis y que lleguen primero a los trabajadores sanitarios y a las personas mayores con patologías, especialmente a las que se encuentran en residencias", analizó Speranza.