El gobierno australiano se hará cargo de tres geriátricos por el coronavirus

Por el rebrote en tres residencias privadas de Melbourne, el gobierno tomará el control de la administración de los geriátricos.

Las autoridades del estado australiano de Victoria acordaron hoy tomar el control de tres residencias geriátricas privadas de Melbourne, la ciudad más importante del estado y en la que se registró un fuerte rebrote de coronavirus.

El rebrote de Melbourne, que se agravó a finales de junio por el presunto incumplimiento de las cuarentenas por parte de viajeros internacionales, hizo que los casos en Victoria se dispararan desde unos 2.200 hasta rondar actualmente los 16.000, del total de 22.300 que acumula Australia desde el inicio de la pandemia.

Victoria reportó hoy 278 casos, la cifra más baja desde el 20 de julio, además de ocho muertos, cuatro de ellos en residencias geriátricas, donde se concentran más de la mitad de los 275 fallecidos por coronavirus que se registran en esta jurisdicción.

"Hay tres centros de cuidados de ancianos en el oeste de Melbourne que nos preocupan. Los Servicios Sanitarios Públicos asumieron hoy la responsabilidad de su gestión operativa", dijo el jefe de Gobierno de Victoria, Daniel Andrews, citado por la agencia de noticias EFE.

El gobierno de Victoria, el segundo estado más poblado de Australia, desplegó en las últimas semanas personal sanitario en estos lugares, que tienen más de 1.000 casos activos entre residentes y trabajadores.

Andrews también anunció un incremento en las ayudas para los trabajadores temporales, muchos de los cuales trabajan en el cuidado de ancianos, para alentar a que se queden en casa si se sienten enfermos y se sometan a pruebas para detectar el virus.

El gobierno de Victoria mantiene confinados desde el 9 de julio a unos 5 millones de personas que viven en Melbourne, pero ante el incremento de casos también decidió imponer un toque de queda nocturno hasta mediados de septiembre.

Las preocupaciones de las autoridades se centran en el aumento de casos de origen desconocido, que superan los 3.000, así como en la expansión del virus en el interior del estado, por lo que se decidió aumentar el número de pruebas para detectar la enfermedad.

Australia, que hasta el rebrote en Melbourne había reactivado su economía tras controlar el nuevo virus, registra ahora varios focos infecciosos en el estado de Nueva Gales del Sur, donde hoy murió otra persona elevando a 361 el total de muertos a nivel nacional.