Leonor de Borbón, legitimada como futura reina de España

La princesa Leonor, heredera al trono de España, realizó un histórico juramento de fidelidad a la Constitución en una solemne ceremonia que se llevó a cabo en el Congreso de los Diputados, en presencia de su padre, el rey Felipe VI, su madre, la reina Letizia, y su hermana, la infanta Sofía.

El acto en el Congreso, similar a los realizados por su padre, Felipe VI, en 1986, y su abuelo, el rey Juan Carlos I, en 1969 durante la dictadura franquista, fue un símbolo de continuidad y compromiso con la Constitución española. Leonor, vestida con pantalón y saco blancos, juró desempeñar sus funciones con lealtad y respetar los derechos de los ciudadanos y las comunidades autónomas, al igual que la lealtad al rey.

La princesa fue homenajeada con aplausos y ovaciones durante varios minutos después de prestar juramento en el Congreso de Representantes. La ceremonia fue seguida por una multitud a través de paneles gigantes en la céntrica Puerta del Sol de Madrid y en otros lugares de la capital española, lo que demostró el interés y apoyo del pueblo español hacia su futura monarca.

La ausencia del rey emérito Juan Carlos I, quien abdicó en 2014 y se instaló en Emiratos Árabes Unidos en 2020 tras escándalos en su última etapa de reinado, fue notable. Sin embargo, se espera que participe en una celebración familiar en el palacio de El Pardo, en las afueras de Madrid, al igual que la reina Sofía.

Por otro lado, los partidos republicanos y los independentistas catalanes, vascos y gallegos, así como una parte de la izquierda radical, no estuvieron presentes en la ceremonia, expresando su desacuerdo con el régimen monárquico español. “Ni monarquía, ni constitución. Democracia. Libertad. Repúblicas”, declararon en un manifiesto, subrayando que representan “el sentimiento de millones de personas” que no respaldan la monarquía.

Tres ministros del gobierno pertenecientes a la plataforma de izquierda Sumar, militantes de partidos republicanos, también decidieron no asistir a la ceremonia. En cambio, el presidente del gobierno en funciones, Pedro Sánchez, estuvo presente, destacando la división en la política española sobre la monarquía.

A diferencia de su abuelo, Juan Carlos I, la princesa Leonor suscita simpatías en un país donde continúa el debate sobre la monarquía.